Feliz debut de Kristaps Porzingis con Boston Celtics, estreno además en el Madison Square Garden ante los Knicks, exequipo del letón. La nueva adquisición de Boston fue esencial en la victoria, formando un tándem ofensivo letal con Jayson Tatum.
Boston se impuso 104-108 con 34 puntos y 11 rebotes de Tatum. Mientras, Porzingis empezó como un tiro en el primer cuarto (15 puntos) y resultó decisivo en la definición del encuentro (7 puntos en los últimos 2 minutos). Sumó el letón 30 puntos, 8 rebotes y 4 tapones, notable su capacidad de intimidación en las cercanías del aro, estuvo por encima del 50% en el tiro y enchufó 5 triples. Lo dicho, mucho más que convincente debut. Brillante.
También debutó en partido oficial con Celtics Jrue Holiday, que estuvo gris en ataque, pero notable en defensa, donde secó al local Jalen Brunson.
El dominicano Al Horford fue suplente por primera vez con Celtics -habia sido titular con el equipo en los 340 partidos de fase regular que había disputado con la elástica bostoniana-. Y fue el mejor de una segunda unidad muy pobre: 8 puntos y 7 rebotes en 26 minutos.
Ese fue el gran punto débil de Celtics, tal y como se esperaba, su segunda unidad. Los suplentes visitantes anotaron 12 puntos por los 38 encestados por los suplentes locales.
Knicks perdió parte de sus opciones debido a la mala noche en ataque de Jalen Brunson y Julius Randle, los dos estandartes ofensivos del equipo neoyorquino, que sumaron un 11 de 43 en el tiro de campo. RJ Barrett e Immanuel Quickley fueron los máximos anotadores locales con 24 puntos cada uno.
Final equlibrado en el que Porzingis resultó relevante al anotar 7 puntos en los últimos 2:03 de juego. Dos libres de Payton Pritchard pusieron el 104-108 y acto seguido una muy buena defensa de Holiday sobre Brunson mató ya definitivamente las escasas opciones de los Knicks.
Boston dominó el primer cuarto, cuarto en el que Knicks hizo un 26,9% en el tiro de campo, y se fue al descanso con un 46-51 a su favor.
New York consiguió equilibrar en el tercer cuarto hasta un 66-66 con un triple de Brunson, después de un enganchón que no pasó a mayores entre Jaylen Brown y el local Hartenstein. Pero Celtics se fue del cuarto ganando 73-82 con una canasta de Porzingis sobre la bocina.
El peor momento visitante llegó en el cuarto final. Un triple de Randle, una pérdida tonta de Boston tras sacar de fondo y una cesta de Grimes pusieron el 99-93 a favor de Knicks, pero la buena noticia para Celtics es que supo rehacerse de la caraja que tenía en esos momentos, una recuperación que le dio el partido.