Phoenix Suns sobrevivió a una actuación histórica de Nikola Jokic. El serbio se marcó un partido mágico hasta anotar 53 puntos y dar 11 asistencias, pero no fue suficiente para detener el juego de unos Suns liderados por Devin Booker y Kevin Durant.
El efecto diferenciador se llamó Landry Shamet. Shamet solo había anotado 14 puntos en todo lo que llevamos de playoffs. Pues bien, esta noche le hizo 19 a Denver Nuggets, incluyendo 4 triples en el último cuarto y un par de tiros libres en el momento clave del partido, un momento en el que T.J. Warren, Durant y él estuvieron perfectos desde la línea de castigo para asegurar la victoria, con marcador final de 129-124 que lleva a los Suns a igualar 2-2 la serie.
Lo de Jokic fue majestuoso: 53 puntos, 11 asistencias y un 20 de 30 en el tiro de campo. Generó 78 puntos para su equipo en el partido. Ningún pívot había metido 50 o más puntos en un partido de playoff desde que lo hiciera un tal Wilt Chamberlain.
Pero es que Jokic por protagonizar, no solo protagonizó el juego de su equipo, sino también la jugada bizarra del partido. Sucedió en el segundo cuarto. Josh Okogie fue a salvar una bola y se incrustó en las primeras filas de sillas, Jokic se fue a esas primeras filas a recuperar el balón para sacar rápido, un aficionado lo retuvo, Jokic dio un golpe a uno de los aficionados para protegerse del público y recuperar el balón.
Lo más anómalo de una situación tan anómala fue que el aficionado envuelto en el incidente con el serbio fue el nuevo propietario de los Suns, Mat Ishbia. Todo muy pasional. Todo muy de playoff pasado un poco de rosca. El incidente se saldó con técnica para Jokic.
Más allá de ese incidente, el partido resultó muy igualado cuarto a cuarto, y nos deparó otra actuación increíble de Devin Booker, cuyo grado de efectividad está siendo colosal. Esta vez, 36 puntos y 12 asistencias, con un 14 de 18 en el tiro de campo. ¡Booker acumula en esta eliminatoria un 64% de acierto en el tiro! Increíble.
Tampoco falló Kevin Durant, que se fue a 36 puntos, 11 rebotes y 6 asistencias con buen acierto en el disparo.
La maravillosa actuación conjunta de Booker y Durant, unida al gran partido de la segunda unidad de Phoenix con Shamet al frente, compensó la nueva baja de Chris Paul y el nuevo partido gris, muy gris, de Deandre Ayton, que está siendo arrasado en esta eliminatoria y que lo único positivo que hizo para su equipo fue apoyarse de forma ilegal sobre el hombro de Jokic en un salto entre dos crucial a 27 segundos del final.
Fue un encuentro en el que los dos equipos estuvieron por encima del 56% de acierto en el tiro de campo y en el que la diferencia de producción de los suplentes de Suns frente a los de Nuggets tuvo su importancia.
En Denver, además del portentoso Jokic, 28 puntos y 7 asistencias de un buen Jamal Murray y doble-doble muy justito de Michael Porter Jr., siendo, eso sí, Murray el único jugador que secundó la ofensiva imparable de Jokic.
La eliminatoria queda 2-2 y con esa igualdad regresa a Denver.