Lakers recuperó el aliento que había perdido últimamente. Venían los angelinos de caer en 4 partidos consecutivos, por lo que la victoria en Orlando fue una especie de bálsamo para el equipo de Darvin Ham, que anda por la competición con un paupérrimo 14-20.
LeBron James, Thomas Bryant y Russell Westbrook fueron las piezas esenciales de Lakers en la victoria, una victoria cómoda (110-129) ante unos Magic que sufrieron la peor noche de Paolo Banchero desde que está en la NBA.
Banchero se metió en problemas de faltas por defender a LeBron James, apenas jugó 22 minutos y poco aportó en ese tiempo, acabando el partido con 4 puntos tras errar 5 de sus 6 disparos a cesta.
Lakers metió 17 triples, lo que es noticia, trabajó muy bien en los tableros y gozó de una muy positiva segunda unidad, en la que Westbrook firmó un triple-doble en 29 minutos estando por encima del 50% en el tiro. Terminó Russ con 15 puntos, 13 rebotes y 13 asistencias, además de que con él en la pista Lakers estuvo 18 puntos arriba en el marcador, el mejor balance de entre todos los jugadores de su equipo.
LeBron sumó 28 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias en una noche negada desde el triple y Thomas Bryant jugó 31 minutos para 21 puntos, 10 rebotes y un 8 de 10 en el tiro. Ya era hora de que Ham dejara minutos en pista a Bryant, un muy buen jugador que está siendo infrautilizado por Lakers de un modo incomprensible por el gusto excesivo de Ham por el small ball.
Los visitantes contaron también con 15 puntos de Tony Brown Jr. en 17 minutos de juego y con 14 de Patrick Beverley, que destacó en la primera parte del encuentro.
Juan Toscano-Anderson cumplió su décimo partido de baja por un esguince de tobillo.
Orlando sufrió con los problemas de faltas de Banchero y Mo Wagner.
Tuvo Magic a 6 jugadors en dobles dígitos anotadores, aunque nadie la rompiera. Markelle Fultz logró 16 puntos, Wendell Carter Jr. hizo 15 y Franz Wagner otros 15.