La aparente debilidad de Warriors y la incuestionable fortaleza de Grizzlies intercambiaron sus realidades actuales en Navidad, un intercambio que nos dejó una cómoda victoria del equipo californiano (123-109) como parte de un escalafón invisible que sigue rigiendo la NBA.
Sin Stephen Curry, al que se le vio disfrutar en la banda, y sin Andrew Wiggins los Warriors resolvieron el compromiso navideño con muchísima solvencia, a pesar de que a Steve Kerr se le llevaron los demonios en materia arbitral, con Warriors recibiendo a lo largo del partido 6 técnicas y una expulsión, la de su mejor hombre en ataque, Jordan Poole.
Poole representó como nadie esa ambivalencia configurada por una buena noche ofensiva y una prematura salida del juego por no controlar las emociones, cuando fue expulsado a 9:20 del final. Suerte para los suyos que ya habían medio resuelto el partido en el tercer cuarto.
Jordan Poole lideró la ofensiva local con 32 puntos anotados en solo 3 cuartos, brillando especialmente en un primer cuarto en el que hizo 17.
Le acompañaron Klay Thompson (24 puntos, 9 rebotes, pero 8 de 25 en el tiro), Donte DiVincenzo (19 puntos, gran primera parte y acierto desde el triple) y sobre todo Draymond Green, que apenas encaró 3 veces el aro para terminar con 3 puntos, pero que sumó 13 rebotes y 13 asistencias en una gran noche.
Resaltar el gran trabajo de la segunda unidad del equipo, con 3 jugadores en dobles figuras anotadoras, marcador favorable con los suplentes en juego y un Ty Jerome que fue importante en el crucial tercer cuarto, acabando el partido con 14 puntos. Anthony Lamb hizo 11, Moses Moody añadió 10 y un canastón a aro pasado que puso a su equipo 97-79 en el tercer cuarto, y Jonathan Kuminga también funcionó razonablemente bien.
Warriors (16-18) resolvió en un tercer cuarto netamente ofensivo (40-30) que dejó el marcador en 99-84 con 12 minutos por jugar.
El triple marcó la gran diferencia en el partido, con el equipo local yéndose a un 18 de 44 y el visitante quedándose en un pobre 9 de 39.
No le fue bien el debut en Navidad a Ja Morant, que estrenaba zapas personalizadas de Nike, las Ja 1. No le fue bien en lo colectivo, porque en lo individual la peleó con acierto sumando 36 puntos, 7 rebotes y 8 asistencias.
En el lado opuesto Desmond Bane, que en su segundo partido tras venir de una lesión quiso estar por encima de su fisico, todavía precario a primera vista, y se estrelló de mala manera. Muy mal Bane, precipitado, individualista, exasperante por momentos, muy alejado de su buen juego habitual. Terminó con 2 de 13 en el tiro y no fue capaz de acertar un solo triple (0 de 7).
A ello se añadió los problemas de faltas de Jaren Jackson Jr., un mal crónico para este jugador.
Buenos minutos de Tyus Jones, gran trabajo en el rebote de Steven Adams y positivo debut navideño en lo puramente individual para el español Santi Aldama, que firmó 9 puntos en 21 minutos tras meter 3 triples.
Memphis pierde con la derrota su igualdad en la cabeza del Oeste al ganar Denver Nuggets, que ahora es líder en solitario.