No es el mejor momento de los Warriors, que siguen jugando sin la aportación del lesionado Stephen Curry. Nueva derrota. Atlanta Hawks pudo con el equipo californiano 121-110 para equilibrar su marca en la presente temporada (37-37).
Trae Young y Danilo Gallinari lideraron el triunfo local. El primero sumó 33 puntos y 15 asistencias tras meter el 60% en el tiro de campo y el segundo colaboró con 25 puntos.
Además, 20 puntos de Kevin Huerter y 19 puntos y 13 rebotes con 9 de 11 en el tiro para el resucitado Clint Capela, que venía de mostrarse en anteriores partidos muy a la baja.
Y todo ello sin contar con Bogdan Bogdanovic y John Collins.
No sirvió de nada el partidazo de Klay Thompson, que brilló a la mejor altura que tenía antes de su larguísimo período de convalecencia. El escolta ha firmado 37 puntos, 7 rebotes y 9 triples. Partidazo el suyo.
El inicial 36-42, en un primer cuarto sin defensas, dejó el partido en una dinámica que no se correspondió con la continuidad. Atlanta rompió el partido en el tercer cuarto con un 32-16 que llevó a los locales a presentarse en el inicio del último cuarto con 18 puntos de ventaja. Ese fue el principio del fin de Warriors.
Warriors, que perdió 16 balones, pierde su cuarto partido en sus últimos 5 compromisos.
Además de Klay, que se fue hasta los 40 minutos de juego -gran noticia para los suyos-, Golden State tuvo a Jordan Poole con 24 puntos y 10 asistencias y a Gary Payton II con 14 puntos.
Kevon Looney fue suplente, se comportaron en pista con juego gris Jonathan Kuminga, Andrew Wiggins y Draymond Green y el mexicano Juan Toscano-Anderson tuvo un paso testimonial por la cancha.
Warriors permanece en dinámica perdedora y aunque todavía está cómodo en la tercera plaza del Oeste y se encuentra en tierra de nadie... ¡cuidado!
Golden State, que también arrastra las bajas, entre otros, de Nemanja Bjelica y Andre Iguodala, no se puede fiar y tiene que seguir remándola.