La gran noche de Cam Johnson en la NBA. El joven jugador consiguió su récord anotador en la liga y culminó su portentosa actuación con un triple sobre la bocina que dio la victoria a su equipo a pesar de jugar sin Chris Paul y Devin Booker.
Sin sus dos grandes estrellas, Phoenix Suns sigue engrosando su trayectoria con victorias, y ya está 51-12.
Los Knicks ganaban 112-113 y disponían de 2 tiros libres de Alec Burks quedando 7 segundos para el final. Burks metió el primero y falló el segundo, el rebote cayó en manos locales, Phoenix jugó a la carrera a la desesperada, Cameron Payne pasó la bola en el último momento a Cam Johnson y este enchufó un triple frontal contra tablero y sobre la bocina que puso el 115-114 definitivo e hizo enloquecer a la afición local. Aquí la jugada triunfal.
Johnson vivió su noche soñada. Partiendo como suplente anotó 38 puntos en 28 minutos, encestando 9 triples de 12 intentos. Esos 38 puntos son su récord anotador en la liga.
Phoenix pasó de perder 23-38 en el tercer cuarto a ganar 34-21 en el último a unos Knicks que no levantan cabeza, y que perdieron en el tercer cuarto a Julius Randle tras ser expulsado en un incidente con Cam Johnson.
En el bando local, Mikal Bridges hizo 20 puntos, Cameron Payne sumó 17 tantos y 16 asistencias y Jae Crowder acabó con 14 puntos y 7 rebotes.
En los Knicks, 25 puntos del expulsado Randle, 20 de un errático RJ Barrett, que falló 20 de sus 26 tiros de campo y 17 puntos, 16 rebotes, 3 tapones y 4 robos para un perfecto Mitchell Robinson, que presentó un 8 de 8 en el lanzamiento de campo.