Dallas Mavericks defiende. Lo hacía con Kristaps Porzingis fuera del juego. Y lo hace con el letón en acción desde hace algunos partidos. En este año 2022 los Mavs se han encaramado a lo más top en el terreno defensivo. A eso se une ahora la mejor versión de Luka Doncic. Es la combinación perfecta. Por eso, estos Mavs llevan 11 victorias en sus últimos 13 partidos.
El esloveno ha metido 41 y 37 puntos en 2 de sus últimos 3 juegos. Empieza a recordar al mejor Doncic. Y su equipo está en una dinámica defensiva increíble. Hoy ha dejado a Memphis en 34 puntos en la primera mitad. Con un 28% en el tiro de campo y 2 de 14 desde el triple. El 48-34 de la primera parte ha marcado el devenir del juego. Porque Dallas ha dominado a Memphis. Siempre por delante en el marcador. Con 22 como máxima ventaja. Sin pasar apuros en ningún momento.
Se enfrentaban dos de los equipos en mejor forma de la NBA. Y no hubo demasiado color. Es cierto que los Grizzlies partían con evidente desventaja por sus bajas. Están sin Desmond Bane, Kyle Anderson y Brandon Clarke. También sin Dillon Brooks y sin Tyus Jones. Y a pesar de ello siguen compitiendo. Estos Grizzlies prometen. Tienen calidad. Tienen juventud. Y gozan ya de presente.
Mientras, Jason Kidd va dando poco a poco un lavado de cara a los Mavs. Nada de anotar a lo loco y olvidarse de la retaguardia. Este equipo es otro equipo. Están trabajando muy bien jugadores que se hallan en segundo plano. Jugadores como Dorian Finney-Smith, Reggie Bullock o Maxi Kleber.
Otros están en el primer plano. El caso más obvio es el de Doncic. Ante Grizzlies... 37 puntos, 11 rebotes, 9 asistencias, 3 robos y por encima del 50% en el tiro. El esloveno enchufó 23 puntos en la segunda mitad.
Kristaps Porzingis cayó eliminado por faltas a 6:43 del final. Hasta ahí hizo 15 tantos, 8 rebotes y 6 tapones. Esa labor ha de acrecentarla: la de intimidar. Y Jalen Brunson siempre despliega calidad técnica. Terminó la noche con 13 puntos.
Mavericks (27-20 ahora) dejó a Memphis (32-17) en un 37,4% al final del juego. Y en 4 de 24 desde el triple. Intimidó con 12 tapones. Y solo tuvo un punto flaco de verdad: el rebote. Porque cedió 21 rechaces en su propio tablero.
Los Grizzlies hicieron lo que pudieron. Demasiada baja de peso como para poder absorberla. Ja Morant tuvo que lanzar 31 veces a canasta. Mucho balón en sus manos. Y perdió 7, sí. Pero volvió a ser un jugador espléndido. Sumó 35 puntos, 13 rebotes y 6 asistencias. Lo malo es que no tuvo apenas compañía en ataque.
De hecho, Melton y Jackson Jr. le acompañaron con 12 y 10 puntos. Pero con 5 de 16 y 4 de 17 en el tiro. Fueron sus más cercanos acompañantes. Porque nadie más llegó a 10 puntos. Así se las gasta Dallas.
El español Santi Aldama jugó minutos de verdad. De los competitivos. Sumó 5 puntos, 1 asistencia y 1 tapón en 13 minutos.