Milwaukee Bucks sobrevivió como pudo a una mala noche de baloncesto, ganó 86-83 a Brooklyn Nets con 68 puntos sumados entre Khris Middleton, el mejor jugador del partido, y Giannis Antetokounmpo y evitó un 3-0 que hubiera dejado a los de Mike Budenholzer a un paso de una segura eliminación.
El baloncesto tiene extraños designios: los 86 puntos que anotó Milwaukee en el segundo partido para sufrir una humillante derrota por 39, le sirvieron en el tercero para ganar el partido por 3. Un cambio radical.
El partido arrancó con un primer cuarto tétrico de los Nets que acabó 30-11 tras amasar los locales una máxima ventaja de 21 puntos (30-9). Brooklyn metió esos 11 puntos tras hacer un 5 de 25 en campo y un 1 de 9 en triples. Y no es que todo el equipo local brillara de igual manera, no. ¡Es que los 30 puntos de Milwaukee los metieron un par de jugadores: 15 puntos de Antetokounmpo y otros 15 de Middleton! El resto de compañeros: 0 puntos.
El segundo cuarto recorrió el camino inverso. Parcial de 15-31 para llegar con 45-42 al descanso. ¡Milwaukee metió 3 puntos en los primeros 7 minutos del cuarto! Parcial de 2-15 para empezar y el partido volteado, cambiado por completo. Eso sí, juego hubo poco, muy poco. Bruce Brown fue el artífice máximo de la remontada visitante. Y Milwaukee acabó el cuarto con 6 de 22 en campo y 1 de 10 en triples.
Tras una primera parte para olvidar, llegó un tercer cuarto medio normal sin que fuera nada del otro mundo. Al menos anduvo igualado y ningún equipo se metió de lleno en una ofensiva deplorable. Muy poco juego asociativo, como ocurrió durante todo el encuentro, un pequeño rifirrafe entre P.J. Tucker y Kevin Durant y los Nets que se pusieron por primera vez por delante en el marcador (64-65) con una canasta del omnipresente Bruce Brown tras remontar los 21 puntos que tuvieron en contra en el primer cuarto.
Y llegó la resolución. Lo mejor que se puede decir del cuarto final es que estuvo igualado y emocionante, pero la realidad es que el juego volvió a brillar por su ausencia. Parcial en los 12 minutos: 19-18. Los locales: 7 de 26 en campo y 1 de 8 en triples. Los visitantes: 8 de 24 en campo y 2 de 7 desde más allá del arco. Más madera para un partido tendente a la depresión.
Lo mejor llegó al final, cuando Khris Middleton y Kevin Durant encadenaron ataques acertados en un toma y daca personal. Porque el partido, en general, se caracterizó por el despliegue físico y el repliegue técnico. Fallos y más fallos, un compendio de malas ejecuciones ofensivas.
Con 82-83 en el marcador se sucedieron los errores hasta que Jrue Holiday anotó una crucial jugada deshaciéndose de su defensor con un precioso reverso (84-83 a 11,4 segundos del final). Luego vino una mala jugada de Nets de principio a fin: malo fue el saque de Blake Griffin y peor aún la precipitación fallida de Bruce Brown. Khris Middleton anotó 2 libres para el 86-83 y Kevin Durant no pudo forzar la prórroga con un triple casi imposible.
De este modo, se dio la circunstancia de que Jrue Holiday, que había hecho un mal partido, resolvió al final, y Bruce Brown, que lo había hecho muy bien, erró en la recta final de mala manera, y no una vez, sino varias.
Middleton fue el mejor del partido con 35 puntos, 15 rebotes y papel crucial al final y Antetokounmpo fue el otro jugador local importante con 33 puntos y 14 rebotes, un Anteto que potenció sus virtudes y arrastró sus carencias, otra vez incapaz de amenazar desde el triple y mal desde los libres (incluidos un airball y una sanción de 10 segundos), pero el griego fue importante para el triunfo de los suyos.
Además, 11 rebotes y 6 tapones de Brook Lopez, que solo metió 3 puntos, y notable esfuerzo defensivo de P.J. Tucker.
Ambos equipos lanzaron muy mal de 3 (solo anotaron 6 y 8 triples, respectivamente) y los Nets hicieron historia en los playoffs al encadenar 3 partidos seguidos sin llegar a tirar en cada uno de ellos 10 libres.
Kevin Durant fue el mejor visitante con 30 puntos, 11 rebotes, 5 asistencias y 4 robos, pero con 11 de 28 en el tiro. Brilló en el final. Kyrie Irving estuvo gris con 22 puntos y solo 1 asistencia y Bruce Brown brilló con luz propia (16 puntos y 11 rebotes) hasta que la pifió en la parte final tomando una responsabilidad que no le correspondía.
En el lado más negativo, Joe Harris, horrible toda la noche. Acabó con 1 de 11 en el tiro a pesar de gozar de tiros liberados, incluido uno completamente solo en el momento caliente del juego.
La serie se pone ahora 2-1 para los Nets y se mantiene viva a la espera del cuarto juego.