Los Sixers contienen la respiración. Su gran estrella, Joel Embiid, solo pudo jugar el primer cuarto en el cuarto partido de la serie ante los Wizards. El camerunés dejó huérfano al equipo durante tres períodos y los Sixers acabaron perdiendo.
La derrota es lo que menos importa a Philadelphia, que gana 3-1 la serie. El foco de la preocupación se centra en la rodilla derecha de su jugador franquicia.
El problema llegó en el primer cuarto. Embiid penetró a canasta, Robin Lopez le salió al paso bajo el aro y el pívot africano no tuvo un buen apoyo cuando tomó tierra. El dolor se localizaba en la rodilla derecha, pero siguió jugando.
La acción ante Lopez llegó a 4:44 del final del primer cuarto (Sixers dominaba 12-20), pero Embiid llegó a disputar 11 minutos del primer período. Luego, fue atendido brevemente, se marchó a los vestuarios y no volvió al juego, terminando su partido con 8 puntos y 6 rebotes en esos escasos 11 minutos de acción.
Embiid venía de promediar 29,3 puntos y 7 rebotes, con un 67,4% de acierto en el tiro de campo, en los 3 primeros partidos de la eliminatoria ante Washington, 3 partidos que cayeron del lado de Sixers.
Tras el cuarto juego, su entrenador, Doc Rivers, señaló: "En este momento no sé si Joel Embiid estará listo para el miércoles". Ese miércoles Sixers y Wizards volverán a encontrarse. Pero antes de eso, Embiid tiene su más importante partido, que no es otro que la resonancia magnética que le harán este martes.