No se puede dar por muerto a Utah Jazz. Pelicans casi lo hizo y casi sucumbe por ello. El equipo de Salt Lake City se resistió a perder, pero terminó mordiendo el polvo ante unos Pelicans muy necesitados de victorias.
Ganaba New Orleans por 17 puntos (107-90) jugándose el cuarto final, justo después de que J.J. Redick firmara su segundo 3+1 de la noche. Luego, Donovan Mitchell falló un mate por exceso de energía, y el partido siguió discurriendo con una cómoda ventaja local que se cifraba en 14 puntos (122-108) a 3:53 del final tras un triple de Lonzo Ball. Todo el pescado parecía vendido, pero...
El pero son estos Jazz. Incluso en sus partidos menos brillantes el equipo está preparado para ganar. Del 122-108 se pasó a un atosigante (para el equipo local) 125-124. Parcial de 3-16 para poner en aprietos a los corazones de los aficionados locales que se habían dado cita en las gradas.
Un triple de Royce O'Neale puso ese apretado 125-124 con 46,7 segundos por jugar. Los Pelicans podían perder un partido que tenían prácticamente amarrado. Pero sobrevivieron.
Brandon Ingram falló un tiro importante y Donovan Mitchell, también, y en la lucha encarnizada por el rebote con Zion Williamson y Rudy Gobert como protagonistas le pitaron falta al francés. Y ahí fue donde el joven Zion mostró de qué pasta está hecho, porque metió los 2 libres para poner el 127-124 a 29,5 segundos del final.
Y vino la jugada de Utah para forzar la prórroga, una jugada que acabó en un gran fiasco por la conjunción de la excelente defensa local y la muy mala definición de la ofensiva visitante. Tanto fue así que todo terminó con un airball, muy airball, de Mike Conley, que no tuvo, desde luego, su mejor partido. El balón llegó a manos locales y en dos pases terminó en el mate ya definitivo de Josh Hart, el que ponía el 129-124 y llevaba la tranquilidad al graderío.
Fue un partido con un muy alto ritmo de juego y en el que el equipo local ofreció buenos porcentajes de tiro, aunque apenas probó con el triple (7 de 11).
Zion Williamson y Brandon Ingram lideraron la ofensiva de Pelicans con 26 puntos cada uno. Zion, que metió 17 tras el descanso, añadió 10 rebotes y 5 asistencias. Además, 23 puntos, 7 rebotes y 8 asistencias de un gran Lonzo Ball, que tiró bien, tal y como está haciendo esta temporada.
Otra vez rotación corta de Van Gundy, con solo 8 jugadores en liza. Eso sí, los 3 suplentes a muy buen nivel para sumar 38 puntos. J.J. Redick hizo uno de sus mejores partidos de la temporada con 17 puntos en 20 minutos y el español Willy Hernangómez volvió a responder muy bien con 8 puntos, 7 rebotes y 3 asistencias en 21 minutos.
Utah, que solo perdió 8 balones en el partido, tuvo como mejor hombre a Bojan Bogdanovic con 31 puntos, 7 rebotes y 7 triples. Partidazo del croata. Rudy Gobert firmó 22 puntos, 9 rebotes y 5 tapones. Otro gran partido del francés. Donovan Mitchell metió 21 y dio 8 asistencias en una mala noche en el tiro y Jordan Clarkson añadió 20.