Primer partido de la jornada sabatina y triunfo de los Knicks en el Madison ante unos Blazers que recuperaban a su gran estrella, Damian Lillard, pero que comparecían nuevamente sin los dos grandes lugartenientes de Lillard, C.J. McCollum y Jusuf Nurkic.
Triunfo por 110-99 de unos Knicks muy sólidos. Buen trabajo defensivo del equipo de Tom Thibodeau, que está imprimiendo a este equipo otro carácter y unas sensaciones positivas en la cancha de las que carecía en temporadas anteriores. Y la escuadra neoyorquina ya está con balance de 11-13, una relación victorias-derrotas impensable antes de empezar la temporada.
El partido se movió en el equilibrio y la moderación, con los Knicks ofreciendo su mejor cara en el segundo cuarto y en un momento importante del último período, cuando con un parcial de 16-7 se pusieron 106-92 a 4:02 del final.
A partir de ahí, Portland lo intentó, pero la victoria de New York nunca estuvo en peligro.
Julius Randle (22 puntos y 11 rebotes) y Elfrid Payton (22 puntos) fueron los catalizadores del juego local, con RJ Barrett en 18 puntos y Alec Burks en 16. Buena línea del pívot Mitchell Robinson y buenos minutos, aunque reducidos en este caso, del joven Immanuel Quickley.
Los Knicks estuvieron en el 50% en el tiro de campo y en el 43,3% desde el triple.
En Portland, liderazgo indiscutible de Damian Lillard con 29 puntos, 9 asistencias, 4 robos y 6 triples. Gary Trent Jr. sumó 19 puntos y Robert Covington, que mejoró su aportación ofensiva, y Enes Kanter, que puso 4 tapones, firmaron sendos dobles-dobles.
El que no estuvo fino ante su exequipo fue Carmelo Anthony, que se marchó del partido habiendo fallado 7 de sus 8 tiros de campo.