Los Cavaliers se dieron un respiro entre tanta polémica y tanta tensión. Primero fue la mala actitud dentro del equipo de Kevin Love; después, el poco tacto de su entrenador, John Beilein, con la parte afroamericana de su plantilla. Anoche, todo se calmó un poco.
Las victorias calman, y esta fue balsámica. En Detroit, en la prórroga y con Kevin Love y Tristan Thompson ejerciendo como piezas decisivas en el final del partido.
Espectacular la actuación de Thompson, que eclipsó el séptimo doble 20 en la temporada del local Andre Drummond, que terminó con 28 puntos y 23 rebotes en 49 minutos tras sumar ya 20 tantos y 13 rebotes en la primera parte.
Thompson batió su récord anotador en la NBA para terminar con 35 puntos, 14 rebotes, 3 tapones y 15 de 20 en el tiro de campo. Fueron 45 minutos de juego para enmarcar, como no se le habían visto nunca en materia ofensiva.
A su lado, las aportaciones de Kevin Love y de los jóvenes Collin Sexton y Darius Garland. Todo para ganar 112-115 en la prórroga tras terminar el tiempo reglamentario 102-102.
Fueron 2 tiros libres de Thompson los que forzaron la prórroga. Luego, ya en ella, un triple de Kevin Love puso el 110-113 y un mate de Thompson a pase de Love saliendo de presión colocó un ya insalvable 110-115 a favor de los visitantes cuando restaban 16 segundos para el final.
En Detroit, además de Drummond, gran partido, una vez más, de Derrick Rose. El base sumó 27 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias.