Nueva desgracia para Boston Celtics. Primero fue la seria lesión de Gordon Hayward. Ahora le toca a Kemba Walker. Todo en un inicio de temporada ejemplar para el equipo de Brad Stevens. La afición está pendiente de Kemba.
Se jugaba el segundo cuarto del Nuggets-Celtics. Walker perseguía el balón. Se desquilibró. Eso le hizo correr agachado con la cabeza por delante. Y llegó el topetazo. Su cabeza contra el abdomen de su compañero Semi Ojeleye. El impacto fue brutal. Doloroso. El giro sufrió toda la descarga. Y Kemba acabó aturdido en el suelo. Casi inmóvil. Conmocionado.
Silencio sepulcral en el Pepsi Center. Las asistencias médicas atendiendo al jugador. El base tirado en el suelo durante varios minutos. Inmovilización. Collarín. Evacuación en una camilla. Traslado al hospital para una evaluación profunda.
Asegura Adrian Wojnarowski que la lesión no parece grave. El jugador tiene una conmoción cerebral. Pero habrá que evaluar si no tiene algún daño en el cuello. La zona es muy delicada. Habrá que esperar.
Kemba Walker entró en el partido con una media de 22,6 puntos. Y se fue de él sin anotar uno solo. Estuvo en pista solo 12 minutos. Erró los 3 tiros de campo que intentó.
La imagen de la jornada es la de Kemba en el suelo. Ahora, solo cabe esperar una pronta recuperación.