Alucinante. Nadie se lo puede creer aún. Hemos asistido a un partido lisérgico. Las normas se han quebrado. Lo único que nos queda es pensar que de verdad ha sucedido. Los milagros existen. Hoy ha ocurrido uno en el Oracle Arena.
Warriors ha perdido en casa ante Clippers. ¡Pero lo que más asombra es cómo ha perdido! Su derrota es un toque de atención a la complacencia. La victoria de Clippers es un premio a la fe.
Clippers ha protagonizado esta noche la mayor remontada de la historia de los playoffs. ¡Perdía por 31 puntos mediado el tercer cuarto! Resulta increíble.
Golden State empezó con un mal sobresalto. DeMarcus Cousins se lesionó a los 4 minutos de partido. No jugó más. A pesar de ello el equipo no se resintió. Descanso y nueva paliza: 73-50. Aquello era un paseo militar. Como en el primer partido. Todo apuntaba a un 4-0. Un 4-0 con humillaciones sin pausa. Pero entonces llegó la segunda parte.
Nada pareció cambiar en principio en la reanudación. A 7:31 del final del tercer cuarto... 94-63 para los locales. Un +31 que no dejaba ninguna duda. Entonces llegó la remontada. Un equipo herido que se revolvió. Un equipo pagado de sí mismo que se abandonó hasta romperse.
¡El parcial de la segunda parte fue de 58-85! Habla por sí solo del estado de gracia de Clippers. Y también de la dejadez defensiva de Golden State.
Los locales aún ganaban por 16 puntos (118-102) a 8 minutos del final. Pero la remontada no se detenía. Hasta llegar a un final emocionante. Y los Clippers superaron ese final. Lou Williams y Landry Shamet fueron los héroes.
Williams ponía el 128-128. Tras meter un triple. Restaba 1:10 para el final. Y Landry Shamet adelantaba 131-133 a los suyos. Con otro triple. A 16 segundos de la conclusión. Luego, Stephen Curry no fue capaz de decidir. Y Montrezl Harrell cerró el partido con 2 libres. Se había culminado la remontada. ¡La mayor remontada de la historia de los playoffs! Nadie se lo podía creer. La grada en estado de shock.
Los visitantes acabaron con un 56,5% en el tiro de campo. Espectaculares sus suplentes. Con 83 puntos. Lou Williams, esencial. Hizo 36 puntos y 11 asistencias. Harrell se fue a 25 con 10 rebotes. Encestó los 9 tiros de campo que intentó. Y el titular Danilo Gallinari aportó 24 puntos.
Warriors estuvo por encima del 50% en el tiro. Pero perdió 22 balones. Y sobre todo perdió los pies cuando creyó que ya no había que jugar más.
Stephen Curry terminó con 29 puntos. Kevin Durant hizo 21 y 9 pérdidas de balón. Klay Thompson sumó 17. Y Draymond Green, 14 con 9 asistencias. Muy bien Kevon Looney. Con 19 tantos en 19 minutos. Todos ellos estarán pensando aún qué ha sucedido. Tendrán que hacer examen de conciencia.