Kobe Bryant asistió como público al Lakers-Nuggets. Y la afición se volcó con él. Sentado a pie de pista pudo ver la mejor noche de LeBron James como Laker. James logró su primer triunfo como local. Haciendo su primer triple-doble con su nuevo equipo.
A esas dos circunstancias se sumó Bryant. Porque su presencia fue una manera más de bendecir a LeBron como Laker.
"Es parte de la familia Laker", dijo el exjugador. A Kobe se le vio aplaudir con fuerza a James. Aunque no hubo encuentro físico entre ellos. Poco importó. Su cercanía se dejó sentir. Todos los jugadores de Lakers hablaban de ella. Sintieron el apoyo del que fue durante 2 décadas el gran referente de la franquicia.
Tras el partido, Kobe mostró su alegría. "Es genial gozar de esta emoción de nuevo en el pabellón", afirmó. Y esas sensaciones positivas fueron correspondidas por James.
LeBron reconoció que le resulta "muy especial" vestir la camiseta que vistiera en su día Bryant. Y sobre la presencia de Kobe aseguró: "Completamente (la noté), por supuesto".
La nueva megaestrella de Lakers tuvo palabras de reconocimiento para su predecesor. "Uno de los grandes Laker de todos los tiempos", dijo de Kobe.
Los Lakers parecen vivir nuevos tiempos. Quedan atrás unos años de infierno.