Minnesota sigue en su buena línea. Anoche, el equipo de Tom Thibodeau fue capaz de imponerse a Toronto para conseguir su 30ª victoria de la temporada y convertirse en el 6º equipo en llegar a esa cifra de triunfos, el 4º que lo consigue en el Oeste.
Obtuvieron los Wolves la victoria a pesar de no poder contar con Jimmy Butler y Jamal Crawford y superando el partidazo de Kyle Lowry, que con 40 puntos batió su mejor marca anotadora del curso.
Lo hicieron gracias a los 22 puntos que Andrew Wiggins anotó en la primera parte y los 22 que Karl-Anthony Towns sumó en la segunda tras llegar al descanso sin haber encestado un solo punto. Estos dos jóvenes volcaron el partido del lado local.
Towns al rescate
La primera parte acabó 54-62 con Towns prácticamente en blanco, limitado por los problemas de faltas y una mala noche. Wiggins aguantó al equipo. Luego, remontaron los Timberwolves con Towns ofreciendo su cara estelar, y ganaron 115-109 tras llegar a ir perdiendo por 11 puntos.
Wiggins acabó con 29 puntos y Towns hizo 22 con 10 rebotes en 28 minutos tras solo lanzar 7 tiros en todo el partido (6 de 7 fue su serie). Además, un buen Taj Gibson, 10 asistencias de Jeff Teague y una actuación sorprendente, en positivo, de Marcus Georges-Hunt.
Lowry se fue a 40 puntos y 6 triples, con 14 de 25 en el tiro y sin pérdidas tras pilotar la nave visitante durante 34 minutos. Su compañero DeMar DeRozan logró 20 puntos, Serge Ibaka hizo 13 y 5 rebotes en 33 minutos y Jonas Valanciunas tuvo una jornada para olvidar jugando solo 11 minutos.