La noche y el día. La vida puede cambiar de golpe en apenas unas horas. Eso es lo que le ha ocurrido a Kevin Love, que ha pasado de abandonar un partido para irse al hospital enfermo a jugar el siguiente y protagonizar su mejor actuación de la temporada.
Cleveland ganó, que no es poco, a los Bucks de un desatado Giannis Antetokounmpo, y Love fue pieza clave en ese triunfo, apurado (124-119) pero triunfo al fin y al cabo. En un enfrentamiento entre 2 equipos en negativo, ya que Cavs presenta marca de 5-6 y Bucks de 4-6 a la espera de la incorporación de Eric Bledsoe.
Kevin Love lideró las operaciones locales junto a LeBron James. El primero se fue a 32 puntos y 16 rebotes y el segundos firmó 30 a la par que se acercaba al triple-doble. Además, 20 puntos de J.R. Smith, 15 de ellos desde el triple.
Antetokounmpo, a la carga
También tuvo su tridente ofensivo Milwaukee, aunque en este caso con una cúspide bien definida en la que habitó un día más Antetokounmpo. El fenómeno heleno firmó 40 puntos, 9 rebotes y 4 tapones con un gran 16 de 21 en el tiro de campo. Su único pero, las pérdidas de balón.
Además, 22 puntos de Malcolm Brogdon, partidazo de Khris Middelton con 22 puntos, 11 asistencias y 7 rebotes y 16 tantos en 17 minutos del suplente Mirza Teletovic.
El técnico visitante, Jason Kidd, no se fue muy contento con la actuación arbitral. Los colegiados pitaron 31 faltas a su equipo y 18 a Cleveland. Llueve sobre mojado.