Joel Embiid había estado sin jugar los últimos 2 partidos por culpa de su maltrecha rodilla, que le dio algunos sustos serios en su última presencia en pista. Sin embargo, el pívot de Sixers volvió como si nada, como si su rodilla estuviera intacta.
Perdieron los Sixers 118-123 ante la brutal actuación de James Harden, generador de un triple-doble inmenso con 51 puntos, 13 rebotes y 13 asistencias. Pero la actuación de Embiid no tuvo nada que envidiar a la de Harden porque resultó completísima.
Embiid estuvo 28 minutos en cancha y en ese tiempo hizo 32 puntos, 7 rebotes, 4 asistencias, 2 tapones y 3 robos, metió el 55% de sus tiros de campo y completó una serie de 4 de 6 desde el triple. Simplemente maravilloso.
Y eso que su presencia en el partido no estaba nada clara. De hecho, se decidió su participación faltando solo 45 minutos para que empezara el encuentro. Luego vino la exhibición. Otra exhibición de un jugador espectacular.
Eso sí, Sixers ya ha anunciado que a Embiid le tocará de nuevo reposar. No viaja con el equipo y no jugará el domingo.