Los Sixers están en racha y aprovecharon ese estado de gracia para amargar el regreso a las canchas de Blake Griffin. El ala-pívot de Clippers volvía a estar activo tras permanecer algo más de un mes lesionado y no tuvo un regreso feliz al sufrir una dolorosa derrota en Filadelfia.
Clippers hizo una primera parte espectacular en el tiro en la que anotó 12 triples de 19 intentos y ya en el tercer cuarto llegó a acumular 19 puntos de ventaja, pero luego llegaron las rebajas. Los Sixers remontaron esos 19 de desventaja, hicieron un parcial de 62-42 en la segunda mitad y terminaron ganando 121-110 pese a no contar con Joel Embiid.
En ese doloroso marco, Griffin dio motivos para la esperanza. No estuvo brillante, pero tampoco estuvo anquilosado. Hizo 12 puntos, 11 rebotes y 5 asistencias en 29 minutos de acción en unos Clippers que están sin Chris Paul. Eso sí, tuvo también sombras en su juego: 3 de 11 en el tiro y 6 pérdidas.
De nada le sirvió a Clippers la exhibición en el tiro de jugadores como Austin Rivers, J.J. Redick o Jamal Crawford, que en los 2 últimos partidos ha dejado atrás su horrible racha en el tiro. Tampoco valieron los 20 rebotes de DeAndre Jordan, que ofreció otro de sus habituales esperpentos desde el tiro libre.
Sixers ganó con 6 jugadores en 10 o más puntos, una lista que encabezaron Nerlens Noel (19 puntos, 8 rebotes, 3 tapones y 5 asistencias) y Richaun Holmes (18 puntos). Bien Sergio Rodríguez desde la suplencia. El canario sumó 9 puntos y 7 asistencias en 20 minutos en un Wells Fargo Center que vibró con su equipo. ¡Porque los Sixers suman 8 victorias en los 11 partidos que han jugado en enero!