Dos veteranos con mucha NBA a sus espaldas han llegado a sendos acuerdos en las últimas horas. Dahntay Jones regresa a los Cavs, con los que estuvo el año pasado, y Dorell Wright jugará con los Clippers. El salario de ambos no está garantizado, por lo que tendrán que pelear en pretemporada para intentar mantenerse en plantilla.
Jones, con 35 años y 12 temporadas de experiencia en la NBA, regresa a Cleveland para jugar con los Cavaliers, el mismo equipo con el que saboreó las mieles del triunfo en las pasadas Finales de la NBA y que le cortó a finales de julio para no tener que garantizar su contrato.
Su nuevo acuerdo no tiene ni tan siquiera un mínimo garantizado y, en un equipo con 13 contratos fijos, tendrá que pelear con un puñado de jóvenes jugadores con una situación contractual parecida a la suya para hacerse un sitio.
El año pasado, Jones llegó al equipo en el último día de la temporada regular, de la que solo jugó un partido, y terminó disputando 15 encuentros de playoffs, aunque con poco más de 3 minutos de juego por noche en momentos en su mayoría intrascendentes, si bien se hizo notar en algunos encuentros.
En cuanto a Wright, a sus 30 años y tras 12 en la NBA, trata de aferrarse a una liga en la que no parece tener mucho sitio. El año pasado se tuvo que marchar a China y, al igual que Jones, solo en los últimos días de la temporada regular encontró sitio. Jugó 5 partidos de playoff con Miami Heat. Lejos quedan sus mejores días, cuando en 2011 lideró la NBA en número de triples anotados vistiendo la camiseta de los Warriors.