Con el inicio de la pretemporada ya a la vista, la mayor incógnita que parece restar en un mercado NBA con todo vendido es la del futuro de J.R. Smith. El escolta ha asegurado que confía en renovar pronto con los Cavs, pero las negociaciones no parecen avanzar.
“Pronto, espero”, ha sido la respuesta del jugador al ser preguntado por cuándo renovará con su hasta ahora equipo en una larga entrevista publicada en la revista Complex.
“No se trata sólo de números. No quiero sentir que me aprovecho de los Cavs después de todo lo que han hecho por mí y tampoco quiero que ellos sientan que estoy tratando de aprovecharme. Es más una cuestión de respeto mutuo”, asegura el escolta cuando se le pregunta por el estancamiento de las negociaciones.
Condenados a entenderse
Lo cierto es que parece que sigue existiendo una brecha entre lo que el jugador pide por renovar y lo que los Cavs están dispuestos a pagar. Ya en julio se hablaba de que Smith estaría buscando un salario en torno a los 15 millones de dólares.
Una cifra que no parece descabellada en el actual mercado dado el peso que tuvo el escolta en la consecución del título el año pasado, pero que la franquicia de Cleveland, con una nómina ya muy cargada, parece reticente a ofrecer.
Todo indica que ambas partes tendrán que ceder para llegar a un acuerdo. Los Cavs, porque necesitan al jugador y, dadas sus cargas salariales, no tienen la capacidad de buscar en el mercado un remplazo. Smith, porque ningún otro equipo puede ofrecerle el dinero que Cleveland podría poner sobre la mesa y, al mismo tiempo, la posibilidad de volver a pelear por el título. El desenlace no debería demorarse mucho.