Miami se aferra a los playoffs. Se agarró como pudo anoche a una tabla en mitad del océano. Fue un acto de simple supervivencia. Y la veteranía fue un grado. Jugadores como Dwyane Wade o Luol Deng ofrecieron sus años de experiencia a la causa Heat.
El equipo llegaba a Charlotte perdiendo 2-3 y con todo el ambiente en contra. Pero a los Hornets les pesó la historia. La franquicia lleva sin pasar una ronda de playoffs desde 2002. Miami está en otra onda. Por eso, el equipo salvó los muebles.
Lo hizo a pesar del sumo esfuerzo desarrollado por el local Kemba Walker, autor de 37 puntos tras lanzar 30 veces a canasta. Su perseverancia y brillantez no fueron suficientes.
Al otro lado de la cancha, un rival cargado de experiencia. Con jugadores como Wade o Deng. Pero también con otros como Joe Johnson o Goran Dragic. Muchas batallas a las espaldas.
Wade y los triples
Wade llevaba meses prescindiendo del triple. Tirando poco y mal. Pero anoche resolvió medio partido desde la línea de 3. Acabó el encuentro con 23 puntos. En realidad, lo decidió en ataque y defensa en el momento oportuno. Le secundó con 21 tantos Deng. Hassan Whiteside intimidó hasta que cometió su sexta falta y todo el quinteto titular anotó dobles dígitos.
Mientras, la suplencia aportó poco. Los jóvenes no funcionaron tan bien como los veteranos. Y Tyler Johnson no jugó al final.
En Hornets, además de Walker, 18 puntos y 9 rebotes del reencontrado Al Jefferson. La irregularidad de Marvin Williams volvió a surgir. Jeremy Lin no tuvo un buen día. Y Nicolas Batum recayó de su lesión en el segundo tiempo y solo pudo disputar 15 minutos.