Miami Heat está dominando a Charlotte Hornets a partir de una imparable ofensiva que está maravillando. Dos victorias anotando una media de 119 puntos. Ese ataque demoledor alcanzó el paroxismo en el segundo cuarto de este segundo partido. Fue tremendo.
Los locales metieron en una noche de records 43 puntos en el segundo cuarto para irse al descanso 12 arriba (72-60)... ¡tras anotar el 74,4% de sus tiros de campo! Esa perfección en el tiro la llevó Hassan Whiteside hasta sus últimas consecuencias: 17 puntos y 13 rebotes al final del partido con 8 de 8 en campo y 1 de 1 en libres. El pívot completa una serie de 17 de 19 en el tiro de campo en lo que va de eliminatoria.
El mejor local fue Dwyane Wade con 28 puntos y 8 asistencias. Pero no estuvo, ni mucho menos, solo. Goran Dragic hizo 18, el citado Whiteside volvió a lucirse, Luol Deng añadió 16 y el novato Josh Richardson, 15 desde la suplencia. Todo funcionó a la perfección.
Miami acabó la noche con un 57,9% en el tiro que incluyó un 56,3 desde el triple. Y solo extravió 8 balones.
En el lado rival, 29 puntos de Kemba Walker, 25 en 27 minutos de un renacido Al Jefferson y lesión en un tobillo de Nicolas Batum, un asunto que preocupa mucho al equipo. Además, 0 de 10 en el tiro para un desafortunado Marvin Williams que se fue del encuentro sin anotar.