Estaba cantado. Los Warriors iban a ganar en casa a los Sixers. No fue una paliza. No tenía sentido que así lo fuera. Golden State se limitó a vencer sin apurar. Eso sí, Klay Thompson y Draymond Green se lo pasaron bien. El primero anotó 40 puntos. El segundo hizo otro triple-doble.
Victoria por 117-105 tras resolver en el segundo cuarto e irse al descanso con 16 de ventaja. El resto fue un dejarse ir. Ahora, Warriors está con 66-7 y sigue acechando a los Bulls de Michael Jordan. Suman 35-0 en casa y 53 victorias consecutivas como locales.
Lo de Thompson en los últimos partidos es una exhibición tras otra. Ha metido 40 puntos en 2 encuentros consecutivos. En los 3 últimos promedia 37,3 tras anotar 23 triples, casi 8 por juego. Un dato resulta esclarecedor sobre su yo tirador. En los 2 últimos partidos ha encestado 80 puntos y solo ha dado 1 asistencia. Está en estado de gracia.
En la victoria ante Sixers, Thompson hizo 40 puntos y 7 triples. A su lado, Draymond Green con 13 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias. Es su 12º triple-doble de la temporada. Solo le supera en esa faceta Russell Westbrook. Stephen Curry estuvo esta vez en segundo plano. Y Marreese Speights lo volvió a hacer muy bien.
Los mejores de Sixers (9-65 en el curso y 3-35 como visitantes) fueron Ish Smith y Carl Landry.