Ni siquiera las molestias musculares de Stephen Curry detienen a los Warriors. El equipo de la Bahía de San Francisco ha ganado en el Día de Navidad a los Cavaliers en la reedición de las Finales de 2015. Lo ha hecho anotando solo 89 puntos y con un gran Draymond Green.
Al final, triunfo por 89-83. Y los Warriors se ponen con un impresionante 28-1 y siguen invictos en casa.
Green ha sido, sin duda, el MVP del partido con 22 puntos, 15 rebotes, 7 asistencias y un gran trabajo defensivo. Curry se ha quedado en 19 puntos con un discreto 40% en el tiro de campo, aunque ha aportado en otras facetas. Klay Thompson ha añadido 18 y Shaun Livingston, 16 con un 8 de 9 en el tiro de campo. Todo ello en un partido que no ha sido bueno.
Los Warriors solo anotaron 89 puntos cuando llegaron al partido promediando 115,5, y se quedaron en un pobre 5 de 18 desde el triple, un acierto impropio de ellos, ¡pero es que los Cavaliers sumaron un 5 de 30 desde más allá del arco y un paupérrimo 31,6% en el tiro de campo!
Baste repasar el desacierto en el tiro del big three visitante. Entre LeBron James, Kevin Love y Kyrie Irving sumaron un 19 de 57 en el tiro de campo y un horrible 1 de 16 desde el triple. James acabó con 25 puntos y 9 rebotes, Irving añadió 13 y Love 10, aunque atrapó 18 rebotes. Otro ejemplo de falta de eficacia ofensiva fue Iman Shumpert, incapaz de anotar en 29 minutos de acción.
El equipo local vio cómo Curry se iba a los vestuarios en el segundo cuarto por sus problemas musculares en una pierna, pero en ese mismo cuarto pudo regresar a la pista. Todo quedó en un susto.
Recta final del partido
LeBron, en la recta final, fue capaz de lo mejor (hacer 2 mates seguidos y 1 tapón en un abrir y cerrar de ojos) y lo peor (errar 3 tiros libres), aunque lo más lamentable llegó con los dos Hack-a... hechos por Matthew Dellavedova. Resultaron cómicos, patéticos y no tuvieron efecto alguno, ya que los Warriors metieron los 4 tiros libres.
La imagen de Dellavedova subiéndose a la chepa de Andre Iguodala y Draymond Green en una lucha falsa por el rebote en los tiros libres se convertirá, sin duda, en uno de los esperpentos de la temporada.