Miami Heat estaba a solo 2 puntos de los Washington Wizards cuando restaban 1:07 para el final del partido que ambos equipos disputaron el pasado lunes en Florida. Fue entonces cuando Gary Neal, sobre la bocina de posesión, anotó el triple que distanció definitivamente a los de la capital federal. Solo hubo un problema, que ese tiro no debió valer.
La liga ha dado la razón a las airadas protestas de Chris Bosh y Erik Spoelstra, que pedían la existencia de pasos previos de Bradley Beal, autor del pase que habilitó a Neal para lanzar su triple.
Tras revisar la jugada, la NBA concluye que debió señalarse la infracción de Beal, quien, tras ver bloqueado su intento de penetrar a canasta, soltó el balón y lo volvió a recoger sin que ningún rival lo tocara antes, y que, por lo tanto, el tiro de Neal no debería haberse producido.
Así, los Heat se habrían quedado sólo 2 abajo y con posesión de balón, una situación muy diferente a la que se produjo. Los de Florida quedaron 5 abajo y terminaron perdiendo de 11 tras no anotar en el tiempo restante y ver cómo, poco antes del final, expulsaban por doble técnica a Bosh por protestar.
Curiosamente, los árbitros revisaron el vídeo de la acción polémica para comprobar que el triple de Neal se producía dentro de tiempo, pero la acción previa de Beal no era revisable, por lo que no pudieron enmendar su error sobre la pista.