El más codiciado agente libre de este verano, LaMarcus Aldridge, ha terminado de deshojar su margarita y ya tiene equipo para la próxima temporada. Será San Antonio Spurs el destino del jugador nacido en la vecina y rival Dallas, según él mismo ha anunciado en las redes sociales. Firmará por 4 temporadas y 80 millones de dólares.
El ala-pívot texano abandona así, tal y como se esperaba, a unos Portland Trail Blazers con los que ha disputado sus, hasta el momento, 9 temporadas en la NBA. Aldridge, que firmará por el salario máximo, tendrá opción de abandonar su actual contrato en la cuarta y última campaña del nuevo acuerdo.
Aldridge se reunió con Spurs, Suns, Lakers, Rockets, Mavericks y Raptors antes de tomar una decisión, pero ha sido finalmente el proyecto que le han presentado los Spurs el que ha convencido al jugador, imponiéndose a los Suns, la otra opción que barajaba en las últimas horas.
Estar a las órdenes de Greg Popovich, en una de las franquicias más respetadas en la liga por su organización económica y deportiva y jugar al lado de Tim Duncan la que puede ser la última temporada de la gran estrella de los Spurs antes de tomar su relevo al frente de uno de los equipos más laureados de la NBA han sido, a igualdad de condiciones económicas, argumentos suficientes para convencer a Aldridge.
Los Spurs no escatimaron esfuerzos en el reclutamiento de Aldridge y Popovich y Duncan, junto a Tony Parker y Kawhi Leonard, se reunieron con el jugador el miércoles para convencerle de las bondades de unirse al equipo texano. El viernes, Popovich y algunos de sus asistentes viajaron a Los Ángeles para hablar de nuevo con el jugador, un encuentro que habría terminado de decantar a su favor la decisión de Aldridge.