El descanso le está sentando muy bien a Kyrie Irving. Han pasado 4 días desde que solo pudiera jugar 12 minutos ante Chicago al agravarse su tendinitis en la rodilla derecha y habrá transcurrido casi una semana cuando el miércoles llegue el primer partido de las Finales del Este contra Hawks.
Pues bien, ese descanso permitirá a Irving jugar el partido de apertura de la final en el Philips Arena de Atlanta. Al menos, el jugador ha sido claro al decir que tiene la intención de jugar ese encuentro y que estará de cinco inicial del partido.
Irving arrastra una tendinitis en la rodilla izquierda y una lesión menor en el pie derecho, lo que le ha hecho rendir de forma intermitente en los playoffs, y en el sexto partido ante los Bulls solo pudo disputar 12 minutos al agravarse su tendinitis, lo que no impidió que su equipo se clasificara ganando con facilidad el partido.
Tras ello, el jugador no entrenó el sábado, pero sí lo ha hecho hoy lunes, lo que da una idea de la progresión física que está teniendo el All-Star.
El estado de Irving cobra una gran importancia teniendo en cuenta que Cleveland está jugando la postemporada sin Kevin Love.