Los Pelicans estarán en los playoffs y los Thunder, no. Ambos equipos vencieron, aunque fueran dos victorias de muy distinto calibre.
OKC venció al peor equipo de la liga, Minnesota, en una pachanga en la que anotó 138 puntos con Russell Westbrook, Dion Waiters y Enes Kanter divirtiéndose. Pero lo importante lo hizo New Orleans al ganar al equipo más en forma en la recta final del campeonato, San Antonio. Partidazo de un Anthony Davis en plan líder y los Spurs que caen a la sexta plaza y tendrán que jugar una primera ronda suicida ante los Clippers.
Mientras, Golden State vencía a Denver en un partido intrascendente para terminar con 67 victorias y un 39-2 como local. Klay Thompson anotó 25 puntos en 16 minutos.
New Orleans 108 San Antonio 103
New Orleans se lo jugaba todo ante su afición frente a un rival que venía de ganar 11 partidos seguidos y que también tenía su necesidad de ganar para lograr el factor cancha en la primera ronda de playoffs. Pues bien, los Pelicans rompieron la racha de los Spurs enviándolos a un incierto cruce con los Clippers y se clasificaron para los playoffs dejando fuera a Oklahoma City Thunder.
Anthony Davis fue el gran protagonista. Accede a sus primeros playoffs y lo hace por la puerta grande, tras hacer un tremendo partido cuando estaba todo en juego: 31 puntos, 13 rebotes y 3 tapones. Su equipo ya hizo toda una declaración de intenciones al endosar un 34-19 a los Spurs en el primer cuarto, pero los texanos encajaron el golpe y aguantaron casi hasta el final. Un triple de Patty Mills acortó hasta el 104-101 a 11 segundos del final, pero ahí llegó la mano firme de Jrue Holiday para sentenciar desde el tiro libre.
A Davis le acompañó en el éxito Tyreke Evans con 19 puntos y 11 asistencias, pero también jugadores como Eric Gordon, el citado Holiday o Norris Cole. El equipo acaba con un 45-37 la temporada, empatado con OKC Thunder, pero por delante, lo que le da la vida.
Los Spurs perdieron a pesar de anotar el 57% de sus tiros y de sumar 33 asistencias. No sirvieron los 23 puntos de Tony Parker ni los 20 de Boris Diaw. Funcionó, por lo tanto, la conexión francesa, pero también jugadores como Tim Duncan o Kawhi Leonard o ese volcán que es Mills cuando se pone (anoche, 15 puntos en 11 minutos). El que no estuvo fino fue Manu Ginóbili: 4 puntos y 4 asistencias con 1 de 7 en el tiro.
Minnesota 113 Oklahoma City 138
El partido fue una broma. El peor equipo de la NBA por marca en la temporada, ¡16-66!, ofreció una imagen penosa en defensa al encajar 47 puntos en el primer cuarto y 138 al final del partido. Una broma de mal gusto.
De nada le sirvió a Thunder exhibirse así en ataque. No resultó exitoso a la postre la demostración de sus tres hombres más importantes, ausente como están Kevin Durant y Serge Ibaka. Ésta sí que se puede decir que fue una victoria pírrica de Thunder, equipo al que las lesiones le han maltratado.
Esos tres hombres importantes de OKC que rindieron al máximo nivel fueron Russell Westbrook (37 puntos, 8 rebotes, 7 asistencias y por encima del 50% en el tiro), Dion Waiters (33 tantos y 5 triples) y Enes Kanter (25 puntos y 15 rebotes). Y Westbrook acabó como máximo anotador de la NBA, pero con el gesto torcido.
En Minnesota, 29 puntos de Kevin Martin, 23 de Andrew Wiggins dirigiéndose a toda prisa al premio de Novato del Año y 19 tantos más 13 asistencias de Zach LaVine, que ha hecho un fantástico final de temporada.
Golden State 133 Denver 126
Otra pachanga de final de curso. Partido intrascendente que sirve, eso sí, para que Warriors complete la temporada con 67 triunfos y un enorme 39-2 en el Oracle Arena. El 36-44 del segundo cuarto y el 71-67 que reflejaba el marcador al descanso lo dice todo. Se trató de un simple divertimento en el que se anotaron 53 puntos al contraataque.
En ese divertimento, salvaje Klay Thompson con 25 puntos en 16 minutos tras meter 5 triples. Stephen Curry apenas jugó 19 minutos, rindiendo bien, eso sí. Y lucidas actuaciones de jugadores como Marreese Speights, Harrison Barnes o Justin Holiday.
Por Denver, 18 puntos en 23 minutos tanto de Danilo Gallinari como de Wilson Chandler. Jusuf Nurkic aportó 17 tantos y 9 rebotes y Erik Green, otros 17 con 7 asistencias.