Muy malas noticias para Jabari Parker y Milwaukee Bucks. Se temía lo peor y así ha sido. La resonancia magnética a la que se ha sometido el jugador novato ha revelado que la rodilla izquierda que se lesionó el lunes no sufre un esguince sino una rotura completa del ligamento cruzado. Ello quiere decir que Parker dice adiós a lo que resta de temporada.
El equipo anunció los resultados de la resonancia magnética, resultados que truncan en diciembre la primera temporada en la NBA del número 2 del pasado draft, extendiendo así la maldición física sobre los últimos drafts, plagados de lesiones justo antes de pasar al profesionalismo o al dar los primeros pasos en la NBA.
Parker se lesionó el lunes ante Phoenix Suns. Se jugaba el tercer cuarto cuando buscó una penetración, se topó con P.J. Tucker y la rodilla izquierda le hizo un feo giro. El jugador quedó tendido en el suelo y tuvo que ser ayudado por sus compañeros para alcanzar los vestuarios. Aunque se dijo, en primera instancia, que podría sufrir un esguince de rodilla, las imágenes apuntaban a algo peor, como así ha sido.
De este modo, el ex de Duke, solo ha podido jugar 25 partidos en su temporada de estreno. Parker era uno de los grandes candidatos para lograr el premio de Novato del Año al promediar 12,3 puntos, 5,5 rebotes y 1,7 asistencias en este arranque de temporada en el que su equipo estaba sorprendiendo para bien: 13 victorias y 12 derrotas. Desde luego, su baja es un gran varapalo para el conjunto que dirige Jason Kidd.