Pablo Prigioni está pendiente de un examen médico que revelará si se pierde algún partido o no. El jugador argentino se torció el tobillo derecho en el transcurso de Pistons-Knicks y tuvo que abandonar el choque cuando estaba finalizando el primer cuarto. No regresó ya a la pista.
Faltaban 51 segundos para concluir el cuarto cuando Prigioni sufrió el esguince de tobillo. Apenas llevaba 6 minutos en pista. Lo mejor de todo fue que tras el encuentro se le practicó una prueba de rayos X que reveló que no existía fractura ósea alguna. Ahora, el tobillo tendrá que ser examinado, eso sí, para ver cuál es el alcance real del esguince.
Problemas en el puesto de base
La baja de Prigioni agrava la situación de New York en el puesto de base porque los que fueran compañeros de vestuario en Vitoria, el español José Manuel Calderón y el argentino Pablo Prigioni, están lesionados. De hecho, Calderón aún no ha debutado oficialmente con su nuevo equipo. El único base puro del equipo que está sano es Shane Larkin, que hoy por hoy no es una garantía.
El armador cordobés estaba jugando bastante minutos como suplente de Larkin al beneficiarse de la baja de Calderón. Hasta el partido disputado esta noche, Prigioni promediaba más de 20 minutos por juego.
No está siendo fácil el inicio para unos Knicks que aún están digiriendo en nuevo sistema ofensivo, el famoso triángulo ofensivo de Tex Winter.