Miami Heat no ha cerrado las puertas oficialmente al regreso a sus filas de Michael Beasley, pero todos los indicios dan a entender que el equipo de Florida no tiene interés por que el díscolo y talentoso jugador vuelva a formar en sus filas.
Según comenta Barry Jackson en el Miami Herald, el cuerpo técnico de los Heat no confía en Beasley por varias razones, y son razones de peso.
Erik Spoelstra y su equipo no están contentos con Beasley por su inconsistencia en el juego, sus problemas para ejecutar los sistemas defensivos y su actitud e inmadurez.
El que el equipo no le haya cerrado las puertas no significa nada. En realidad, es una cuestión meramente formal que no implica que esas puertas estén de verdad abiertas todavía.
Su número ya es de otro
Otra prueba del escaso interés por reincorporar al jugador lo tenemos en que Miami ha firmado a Tyler Johnson y que éste llevará el número 8 que portó la pasada temporada Beasley.
Beasley es otro caso de profunda decepción partiendo del puesto número 2 del draft de 2008.
Desde entonces, ofreció una prometedora temporada inaugural con Miami Heat, se estancó en su segundo año, llegó a meter 19,2 puntos por partido en su tercera temporada al llegar a Minnesota y tras ello... la nada. A partir de ese tercer año no ha hecho nada más que caminar hacia el desastre por su inconsistencia en el juego y sus constantes problemas extradeportivos.