Knicks o Bulls. Esa fue la disyuntiva final a la que se enfrentó Carmelo Anthony como agente libre este mismo mes. Lo ha confesado el jugador en unas declaraciones efectuadas a ESPN.
Melo ha explicado que los Lakers se quedaron en el camino como tercera opción en beneficio de Knicks y Bulls, los 2 equipos que llegaron al final del camino. Y no niega que fue una dura decisión descartar a Chicago, una de las decisiones más duras de su carrera deportiva. Pero apostó por la continuidad, por quedarse en su Nueva York natal.
Resultó importante su fe en el futuro del equipo con la llegada de Phil Jackson a la presidencia y Derek Fisher al banquillo. Porque Melo cree que los Knicks no están lejos de ser considerados como un equipo aspirante al anillo.
Confía en Jackson
La astronómica cifra de su nuevo contrato marea: ¡124 millones de dólares por 5 años!. Pero a pesar de ello, Anthony deja clara una cosa: "Quiero ganar. No me importa el dinero".
También quiere dejar algo claro: su confianza en Jackson. "Creo que Phil (Jackson) hará lo que tenga que hacer para preocuparse por eso (ser un equipo aspirante)", dice el alero.
Lo cierto es que, con este compromiso con los Knicks, Melo parece enviar un mensaje y ese mensaje no es otro que le gustaría llegar hasta el final de su carrera con el equipo histórico de su ciudad natal.