Tras varios días de reuniones y puesta en común de la contabilidad de la totalidad de las franquicias de la liga, la NBA ha establecido cuáles serán los límites salariales para la próxima temporada. El tope salarial sube un 7,5% y con él, el umbral del impuesto de lujo.
El nuevo tope salarial que habrá de aplicarse en la temporada venidera será de 63,065 millones de dólares. Ésa es la cifra que las franquicias habrán de tener como referencia a la hora de calcular su espacio salarial para la contratación de agentes libres, un contratación que se podrá empezar a hacer oficial a partir de la medianoche de este jueves, 10 de julio.
Acorde con la subida del tope salarial, se eleva el umbral del impuesto de lujo a partir del cual los equipos habrán de pagar penalizaciones por sus excesos salariales. Ese límite será de 76,829 millones de dólares para la temporada 2014-15.
Las subidas anunciadas son ligeramente inferiores a las estimaciones que la propia liga hizo públicas en el mes de abril pero, en todo caso, el tope salarial anunciado es el más alto en la historia de la liga desde que se establecieron este tipo de limitaciones, algo que demuestra la buena salud financiera de la NBA.