La pelea por los puestos de playoffs en el Oeste no se detiene. Tras la jornada de anoche, Dallas, Memphis y Phoenix están empatados en la séptima plaza con balances idénticos: 44-31. Cada uno tiene que jugar 7 partidos. La cosa está que arde.
La jornada nos dejó una delicada derrota de Memphis ante Minnesota con triple-doble de Kevin Love y gran tercer cuarto de Ricky Rubio. El mejor de los Grizzlies: el también español Marc Gasol.
También nos dejó un triunfo incontestable de Spurs sobre Warriors para firmar su decimonovena victoria consecutiva. Muy bien Tony Parker y Manu Ginóbili y excelso Tim Duncan.
Además, los Clippers ganaron en Phoenix para proclamarse campeones de su división.
Minnesota 102 Memphis 88
Minnesota equilibró su balance de temporada (37-37) e infligió una dolorosa derrota a unos Grizzlies que se están jugando todo en este final de temporada. Sin Nikola Pekovic, pero con un Gorgui Dieng ofreciendo grandes prestaciones y el regreso del lesionado Ronny Turiaf, los Wolves controlaron el juego interior de Memphis, anulando por completo a Zacn Randolph.
Otra vez Kevin Love hizo magia. El ala-pívot local firmó su segundo triple-doble en los últimos 4 partidos. Acabó con 24 puntos, 16 rebotes, 10 asistencias y un 60% en el tiro de campo. Estuvo enorme.
Los Timberwolves defendieron muy bien, a lo que contribuyó el físico de Dieng y Turiaf, y tuvieron a un Ricky Rubio muy acertado en el decisivo tercer cuarto. Tras una mala primera parte en la que solo anotó 1 punto, Ricky salió muy motivado en la reanudación metiendo 6 puntos en los primeros minutos y anotando 13 en el cuarto para sumar 14 puntos, 7 asistencias y 3 robos y dominar a Mike Conley antes de torcerse un tobillo. Además, Kevin Martin anotó 21 tantos y el reaparecido Turiaf estuvo grande: 11 puntos, 7 rebotes y 3 tapones en 22 minutos con un 5 de 5 en el tiro. J.J. Barea, mientras, dio 7 asistencias en 15 minutos, pero estuvo flojo en el lanzamiento.
La buena defensa, el sentido del pase extra y la agilidad ofensiva en la segunda parte marcaron el despegue de Minnesota, que acabó el tercer cuarto con un cómodo 77-61.
Memphis tuvo como mejor jugador a Marc Gasol, autor de 18 puntos, 7 rebotes y 4 asistencias, pero sufrió la horrible jornada de sus dos otras piezas fundamentales: Zach Randolph y Mike Conley, que sumaron un 4 de 23 en el tiro. Z-Bo acabó con 4 puntos y un 1 de 8 y Conley con 7 y un 3 de 15. Además, Tony Allen sigue a muy bajo nivel.
San Antonio 111 Golden State 90
Los Spurs son una auténtica trituradora. Absolutamente imparables. Esta vez, ante Warriors, desde el salto inicial, aunque ayudó mucho el desastre interior de los visitantes. Porque Golden State sigue sin David Lee y Andrew Bogut y anoche solo pudo contar 4 minutos con Jermaine O'Neal.
El resultado fue el abuso indiscriminado de Tim Duncan en la pintura. El de las Islas Vírgenes completó un tremendo primer cuarto, que acabó con un 31-18 que abrió las puertas del triunfo local.
San Antonio suma ya 19 victorias al hilo y está a una de alcanzar las 60 en la temporada. No importó que ante Warriors le fallara el triple porque el resto de su juego resultó más que sólido. Dominio del rebote, ofensiva maravillosa y control absoluto del partido con 6 jugadores en 10 o más puntos.
Tony Parker firmó 18 con 8 asistencias, Duncan maravilló con sus 15 tantos y 8 rebotes en 20 minutos y Manu Ginóbili volvió a hacer un partidazo completísimo con 13 tantos, 6 rebotes y 5 asistencias en solo 19 minutos en los que su equipo sumó un +21. El argentino anotó una bella canasta sobra la bocina del segundo cuarto.
Sin Lee, Bogut y O'Neal, el interior visitante fue un agujero por mucho que Marreese Speights se sacara de la chistera una gran actuación (22 puntos y 9 rebotes). Jordan Crawford metió 16, pero abusando del tiro, y la defensa local minimizó el alcance de Stephen Curry, otro aspecto elemental en el triunfo. Curry dio 10 asistencias, pero solo metió 11 puntos.
Phoenix 108 L.A. Clippers 112
En la tensa situación de Phoenix, los Clippers no eran el mejor rival posible, como se comprobó en el cuarto final. Los Suns comenzaron el último cuarto con una ventaja notable (91-78) que en los primeros momentos del último período ampliaron a 14 puntos, pero Clippers reaccionó a lo grande y finalizó el cuarto con un parcial de 17-34 para ganar.
Ese salvaje cuarto final hizo que los Clippers se proclamaran campeones de la División Pacífico tras haber ganado 17 de sus últimos 19 compromisos. Da igual que no tengan sanos a Jamal Crawford, J.J. Redick y Danny Granger. El engranaje del equipo sigue funcionando.
Anoche, Blake Griffin y Darren Collison lideraron la ofensiva con 23 puntos, aunque fue Chris Paul el que la dirigió con grandeza para terminar con 20 tantos, 9 asistencias y 4 triples. Además, 19 puntos de un muy efectivo Matt Barnes. Jared Dudley cerró el partido anotando 2 libres a 8 segundos del final.
Los Suns tuvieron a 8 jugadores de los 9 que jugaron en dobles dígitos anotadores, algo bastante inhabitual. Marcus Morris metió 16 en 19 minutos y Gerald Green y Goran Dragic totalizaron 15 cada uno, a los que el esloveno añadió 8 asistencias. Bien desde el triple Channing Frye y doble doble de P.J. Tucker. A los Suns, tras una enorme temporada, les va a tocar sufrir.