Kyrie Irving tiene para, como mínimo, un par de semanas de baja, pero su lesión es menos seria de lo que en un principio se creía.
El jugador se ha sometido hoy a una resonancia magnética y su equipo ha informado de que sufre una lesión en el bíceps izquierdo que le mantendrá 2 semanas fuera del juego, momento tras el cual será evaluado de nuevo por los médicos.
La lesión se produjo cuando restaban 2:20 para la finalización del primer cuarto del partido Clippers-Cavaliers y tuvo su origen en un choque con Blake Griffin. Irving abandonó la pista y ya no regresó a ella.
A pesar del contratiempo que supone la lesión, la buena noticia para Cleveland es que su estrella no se perderá la temporada, tal y como se especulaba antes de que se supiera el resultado de la resonancia.
Irving lidera a su equipo con promedios de 21,2 puntos y 6,2 asistencias en la presente temporada.