La belleza del baloncesto se mide por situaciones como la vivida en el mítico Carrier Dome, donde el equipo local, Syracuse, ha perdido su carácter de invicto al caer con una escuadra, Boston College, que llegaba con un balance de 6-19 por las 25 victorias sin derrotas del equipo local. Tras tan monumental sorpresa, sólo queda invicta en la NCAA I la universidad de Wichita State, que atesora un 28-0.
Tras perder en casa en la prórroga por 59-62, Syracuse ve, además, como en su conferencia, la ACC, le pasa en la clasificación Virginia con un 13-1 por el 12-1 que lleva el equipo Orange en los enfrentamientos con equipos de su conferencia. Y es que lo vivido en el Carrier Dome dejó sin palabras a los 26.716 espectadores que se dieron cita en las gradas y dejó obnubilado hasta al propio entrenador local, el veterano Jim Boeheim.
Syracuse 59 Boston College 62 (tras prórroga)
Cuando acabó la prórroga los jugadores de Boston College formaban una piña blanca en mitad de la pista. Aún no se podían creer lo que habían conseguido. Se abrazaban, gritaban... la fiesta era espectacular.
Tras el 25-17 de la primera parte, todos esperaban que en la segunda mitad Syracuse no tuviera ningún problema para ganar, pero el partido se fue complicando y esta vez el equipo de Boeheim no tuvo la suerte de otras veces.
Con empate a 50, Tyler Ennis, primero, y Rakeem Christmas, después, tuvieron tiros para ganar, pero el partido desembocó en la prórroga. Ya en el tiempo extra, 2 tiros libres de Lonnie Jackson pusieron el 59-62. Todavía podía haber una segunda prolongación, pero no la hubo. Porque Trevor Cooney erró el triple del empate.
Finalizaba el partido con victoria visitante liderada por los 20 puntos y 4 triples de Olivier Hanlah y los 9 tantos y 14 rebotes de Ryan Anderson. Los mejores de los Eagles.
En Syracuse, 20 tantos y 11 rebotes de un C.J. Fair que acabó con un gris 7 de 23 en el tiro y 14 tantos, 8 rebotes y 6 asistencias de Tyler Ennis que no puso ser esta vez el salvador de su equipo.