Larry Sanders tiene fracturado el hueso orbital del ojo derecho y es baja indefinida en Milwaukee Bucks, una baja que se extenderá, como mínimo, hasta después de la celebración del All-Star, según ha avanzado su entrenador, Larry Drew.
El jugador de los Bucks se lesionó el pasado sábado ante Houston Rockets al poco de empezar. Se jugaba el primer cuarto cuando luchando por un rebote con James Harden se dañó un ojo. Harden golpeó al caer con el codo el ojo derecho de Sanders de forma completamente involuntaria fracturándole el hueso orbital.
La lesión, producto de la mala suerte, es un episodio más dentro de la tormentosa temporada del pívot de los Bucks tanto dentro como fuera de las pistas. Una temporada con sanciones y lesiones que le han hecho perderse muchos partidos en una escuadra, Milwaukee, que solo suma 9 victorias.
El rendimiento de Sanders está siendo decepcionante a las puertas de comenzar el próximo año su primera temporada con gran contrato, una gran extensión que no corresponde con sus actuales números, ya que promedia 7,7 puntos, 7,2 rebotes y 1,7 tapones por partido. Y esta lesión le llega justo cuando mejor estaba rindiendo.