Francia dejó helada a la afición eslovena. Los anfitriones habían realizado hasta hoy un torneo notable, pero llegado el momento de la verdad fallaron, lo que les hace quedarse sin opción de medalla y tener que luchar a brazo partido por un hueco en el Mundial de España 2014.
Mientras, los franceses jugarán contra España en semifinales en busca de una medalla segura. Unos franceses que superaron el hostil ambiente esloveno gracias a una enorme actuación del jugador de los Spurs Tony Parker, que recibió buen apoyo de otros 2 NBA: Nicolas Batum y Boris Diaw.
El partido tuvo dos partes bien diferenciadas. La primera, muy equilibrada y parca en anotación, acabó 24-26. El parcial de la segunda se abrió a ciertas alegrías para arrojar un resultado de 38-46 para la selección entrenada por Collet.
Parker concluyó con 27 puntos, lanzó 20 veces a canasta y disputó 35 minutos, lo que habla del enorme peso que tuvo en el equipo. Junto a él, Batum, que hizo 14 tantos y 5 rebotes, y un sólido Boris Diaw.
Eslovenia, mientras, sucumbió ante la gran dependencia de Goran Dragic (18 puntos y 6 pases de canasta) en la ofensiva. Su hermano, Zoran Dragic, sumó 12 tantos y 5 rebotes en la derrota.