El anuncio es inminente. Según la revista SLAM, Allen Iverson anunciará en los próximos días de forma oficial su retirada del baloncesto. Está claro que sus intentos de volver a jugar y regresar a su sitio en la cancha no han llegado a buen puerto.
De hecho, Iverson jugó su último partido en el año 2011. Fue en Turquía. Mientras, su último encuentro en la NBA data de 2010 con la elástica de Philadelphia 76ers, el equipo al que se asocia la carrera profesional del jugador de Virginia.
A sus 38 años, Iverson parece haberse rendido a la evidencia. Su figura, antaño estelar, ya no genera atracción entre los equipos de la NBA y ya no le merece la pena arrastrarse por las canchas del mundo intentando volver a ser el que fue. Por eso, su adiós se torna ya definitivo.
Una carrera impresionante
El gran lunar de Iverson es no haber podido ganar un anillo. Lo más lejos que llegó fue a unas Finales, que no es poco.
Tras ser elegido como número 1 del Draft de 1996, el que fuera jugador de la Universidad de Georgetown fue nombrado Novato del Año en su temporada de debut. Luego, jugaría 13 años más en la NBA, gran parte de ellos en los Sixers.
Fue 1 vez MVP de la liga y 2 MVP del All-Star, en el que participó 11 veces. Además, ganó en 4 ocasiones el título de máximo anotador de la competición y fue 3 veces el máximo ladrón de balones. Todo ello en una carrera en la que jugó 914 partidos de fase regular en los que promedió la friolera de 41,1 minutos de juego para hacer 26,7 puntos y 6,2 asistencias.
Son datos que hablan bien a las claras del jugador que está a punto de decir adiós a su estelar carrera deportiva.