"Es más que probable que tenga que recurrir a la cirugía cuando todo acabe". De esta forma se expresaba el ala-pívot David Lee al hablar a NBA TV sobre su lesión de cadera y la solución que buscará una vez concluya la presente temporada.
Tras hacer una memorable temporada regular con los Warriors y ser All-Star, Lee debutó por fin en los playoffs, algo ajeno hasta este año a su carrera, pero en el primer partido de la primera ronda se lesionó.
Se anunció que sufría un desgarro en el músculo flexor de la cadera y que su postemporada había acabado. Pero sorprendentemente ha regresado al juego, aunque con una gigantesca limitación de tiempo.
En sus 3 últimos partidos, todos ante Spurs, ha jugado 1, 3 y 8 minutos. Es decir, 12 minutos en 3 encuentros, en los que metió 5 puntos y recolectó 8 rebotes. Nada que ver con los 18,5 puntos, 11,2 rebotes y 3,5 asistencias que promedió en los 79 encuentros de fase regular que disputó.
Aún así, Lee ha obrado el milagro de vestirse de corto y está ayudando a sus compañeros en la medida de sus posibilidades, que es muy pequeña, sacrificando sus números y su ego. Algo poco común en la NBA.
Lo más probable es que tenga que pasar por el quirófano para arreglar su situación y poder afrontar la próxima temporada en perfectas condiciones.