Charlotte Bobcats ha hecho un doble movimiento en el mercado. Ha fichado al ala-pívot Jeff Adrien y se ha desprendido del jugador exterior Cory Higgins. Lo ha anunciado hoy su presidente de Operaciones de Baloncesto, Rod Higgings, que es el padre del jugador que ha sido despedido. Difícil circunstancia.
Se trata de un movimiento menor dentro de la dinámica del equipo.
Adrien ya hizo la pretemporada con el equipo de Carolina del Norte y estaba brillando sobremanera en la NBA D-League con Rio Grande Valley Vipers, equipo con el que estaba promediando 17,6 puntos y 11,2 rebotes por partido.
Se trata de un ala-pívot bajo, 2,01 de altura, pero poderoso, 110 kilos, que nació hace 26 años y que tras jugar en la Universidad de Connecticut (UConn) no fue drafteado.
Hasta la fecha, Adrien ha disputado 31 partidos en la NBA con las camisetas de Golden State Warriors y Houston Rockets.
Cory Higgins, fuera del equipo
La llegada de Adrien ha conllevado la baja de Cory Higgins, un escolta-base californiano de 1,96 y 23 años que en la presente temporada había disputado 6 encuentros con los Bobcats promediando 2,3 puntos en 5,3 minutos.
Su contrato hubiera quedado completamente garantizado de seguir mañana en el equipo, de ahí su despido. El jugador es hijo del general manager de la franquicia de Charlotte, Rod Higgins, encargado de anunciar hoy su despido.
Higgins, formado en la Universidad de Colorado y que, como Adrien, no fue drafteado en su día, acumula una experiencia de 38 encuentros en la NBA en los que ha metido 3,9 puntos por juego en 11 minutos.