La liga ha dictaminado que los Oklahoma City Thunder deberán compensar a los Boston Celtics por no compartir la información médica de que disponían sobre Jeff Green cuando le traspasaron en 2011. Tendrán que entregarles una segunda ronda de draft de 2013.
Los Celtics habían presentado una queja ante la NBA al considerar que cuando acordaron el traspaso de Green y otros jugadores, en febrero de 2011, los servicios médicos de los Thunder ya tenían información sobre los problemas cardiovasculares de Jeff Green.
Al ala-pívot le fue diagnosticado un aneurisma de aorta el pasado diciembre, del que tuvo que ser operado y que le obligó a dejar temporalmente el baloncesto, lo que llevó a los Celtics a anular el contrato por 1 año que le habían firmado días antes de conocer el diagnóstico.
En un comunicado, el comisionado de la liga, David Stern, ha asegurado que “no hay evidencia de mala fe o de cualquier intento de ocultar información por parte de los directivos o médicos de los Thunder, pero los cardiólogos de Oklahoma City estaban en posesión de información acerca de Green que no fue compartida con los directivos de los Thunder y que debería haber sido revelada a los Celtics en conexión con el traspaso de Green en febrero de 2011”.
Eso sí, pese a la inexistencia de mala fe, los Thunder deberán ceder, como compensación a Boston por la falta de la adecuada información, la segunda ronda de draft de la próxima temporada que adquirieron a Charlotte en el traspaso de Byron Mullens y que, salvo mejora sustancial de los Bobcats, es de esperar que se sitúe en la parte alta de la ronda. Por su parte, Jeff Green se encuentra ya recuperado y es agente libre a la búsqueda de equipo este verano.