Regresó al juego Kobe Bryant, pero aportó poco al juego de los suyos. Los Lakers recibieron la segunda paliza en pocos días a manos de los Spurs. Esta vez fue en Texas, de la mano de un 'big three' de leyenda.
Tim Duncan, Manu Ginóbili y Tony Parker fueron la punta de lanza de una nueva salvajada ofensiva de los chicos de Popovich, pero el equipo también reposó en sólidos elementos defensivos. Uno de ellos fue la defensa sobre Kobe Bryant. Y es que Spurs anda sobradísimo de escoltas y aleros capaces de defender a Kobe, tales como Kawhi Leonard o Stephen Jackson. Muy buena también la labor de Boris Diaw sobre Pau Gasol, que no tuvo una buena noche.
El partido se rompió en el tercer cuarto y el último fue un simple dejar pasar el tiempo.
Además, Memphis ganó con más apuros de los esperados a Charlotte y Dallas celebró su clasificación para playoffs derrotando a los Warriors.
San Antonio 121 L.A.Lakers 97
El ritmo ofensivo de los Spurs, lejos de decaer, se articuló en un continuo 'in crescendo' y el partido llegó al descanso con un apretado 56-52 para los locales que no parecía reflejar lo visto realmente en la cancha.
Para entonces, Duncan, enorme el gran Tim, Parker y Ginóbili ya sumaban un triple-doble entre los tres con 32 puntos, 10 rebotes y 12 asistencias. Para entonces, Bryant sólo había sido capaz de anotar 7 puntos. Y para entonces, y esto era lo más preocupante, San Antonio sólo atesoraba 4 puntos de ventaja tras meter el 57% de sus tiros de campo y 5 de 7 triples.
Pero llegó el tercer cuarto y tras unos primeros minutos de cierto equilibrio el partido se rompió. Los Spurs ejercieron de rodillo implacable y se llevaron por delante la nave Laker. Según mejoraba la ofensiva de Bryant, así empeoraban las cosas para su equipo. Fue este tercer cuarto, un momento de rutilante juego local y maravilloso baloncesto de Ginóbili, embutido en su personaje de hombre killer.
Manu hizo grandes canasta y le dio un pase de quarterback a Matt Bonner para enmarcar. Y la ventaja fue subiendo y subiendo hasta superar los 20 puntos. Al final del tercer cuarto: +18 para Spurs y partido resuelto. Porque el cuarto final fue puro trámite con el trío estelar de los Spurs bromeando en el banquillo y los Lakers dando ya por perdido el encuentro.
Los Spurs logran así una victoria que les sirve para mantener su ventaja con OKC y seguir encaramados en la primera posición del Oeste. Lo logran tras dar un nuevo baño a los Lakers de la mano de un 'big three' que metió 61 puntos sin jugar muchos minutos. Tim Duncan hizo 21 tantos, 8 rebotes y 3 robos en 25 minutos, Tony Parker sumó 20 puntos y 10 asistencias en 27 minutos y un gran Manu Ginóbili se fue a 20 tantos, 6 rebotes, 7 asistencias y 3 de 4 triples en 25 minutos.
Pero es que a nivel colectivo, los Spurs anduvieron grandiosos en su ataque: 61% en tiro de campo, 10 de 15 triples y 17 de 18 en libres. Circulación de balón maravillosa para una ejecución al estilo precisión quirúrgica.
En los Lakers, sobrepasados por todos los flancos, 18 puntos de Kobe Bryant, 17, pero con sólo 2 rebotes, de Andrew Bynum y 14 de Matt Barnes. Pau Gasol tuvo una noche discreta con 11 puntos, 8 rebotes y 2 tapones en 29 minutos (bonito su mate ante Duncan) y Ramon Sessions ofreció una actuación desangelada.
Charlotte 80 Memphis 85
Memphis aseguró su quinta plaza en el Oeste y aún puede aspirar a las cuarta. Para ello tuvo que ganar, no sin apuros, al peor equipo de la competición, unos Bobcats que acumulan 19 derrotas consecutivas para un balance de 7-55 y que sólo han ganado 4 encuentros en el Time Warner Cable Arena.
No fue nada sencillo el triunfo. No en vano, los locales ganaban por 8 al finalizar el tercer cuarto, pero fue en el último acto donde se comprobó la diferencia entre equipos y la gran calidad de la plantilla de Memphis, cuyo entrenador, Lionel Hollins, se permitió el lujo de repartir mucho los minutos.
Con Gay (9 puntos) y Gasol (8 tantos y 4 rebotes en 22 minutos) sin tener importancia en el juego, ganaron los Grizzlies. Fue gracias a un parcial de 15-28 en el cuarto final con importancia capital de Conley, que fue el mejor visitante con 20 puntos y 7 asistencias. Zach Randolph, mientras, acabó con 14 tantos en 21 minutos.
Los Bobcats, que tenían muchas bajas, no aprovecharon el mal partido de Memphis. Gerald Henderson fue su indiscutible figura con 32 puntos.
Dallas gana Golden State
Dallas celebró su clasificación para playoffs ganando 104-94 a los Warriors. En realidad, la clasificación matemática la había logrado el jueves por la noche sin jugar, debido a los resultados de la pasada jornada. No ha sido una buena campaña regular para los actuales campeones, que son sextos en el Oeste con un 36-28. Se esperaba algo más.
Anoche, ganaron en casa los Mavs a pesar de tener algunos lastres importantes, tales como los 18 balones que perdieron o su penoso desempeño desde más allá del arco (3 de 19 triples). A cambio, consiguieron dominar el rebote y estuvieron extremadamente acertados desde la línea de personal.
Una buena noticia para Dallas fue el buen rendimiento otra vez de Vince Carter (19 puntos y 9 rebotes en 27 minutos), al que se unió un gran Brandan Wright (17 y 7 en sólo 17 minutos con 8 de 9 en el tiro de campo). Dirk Nowitzki y Delonte West sumaron 16 puntos cada uno.
En Warriors, 26 puntos del joven Klay Thompson, 20 con 8 rebotes de Brandon Rush y 19 con 4 triples de Dorell Wright. El base Charles Jenkins sumó un doble doble con 10 puntos y asistencias.