Las disculpas de Kevin Love tras pisar a Luis Scola y sus declaraciones asegurando que se había tratado de una acción no intencionada no le han servido para evitar el castigo de las autoridades disciplinarias de la liga, que no parecen haber creído sus palabras.
Stu Jackson, máximo responsable disciplinario de la NBA, ha anunciado la decisión de la liga de sancionar con 2 encuentros de suspensión al ala-pívot de los Timberwolves, un castigo que le impedirá jugar mañana ante Sacramento y al día siguiente ante Memphis.
La acción objeto de sanción se produjo cuando restaban 8:34 para el final del tercer cuarto del partido que enfrentó a Rockets y Timberwolves en Minnesota el pasado sábado.
Scola cayó al suelo tras cometer falta Love sobre él, falta que no fue señalizada, y el ala-pívot de los Wolves pisó en la cara y el pecho al argentino al echar a correr hacia el otro lado de la cancha.
Love aseguró posteriormente que se había tratado de “un tropezón” no intencionado y pidió disculpas al jugador de los Rockets, pero no es lo que pareció sobre la pista ni, desde luego, la sensación que deja el ver la repetición de la jugada, en la que el jugador de los Wolves parece pisar con toda intención al argentino. Una acción injustificable que los responsables de la liga no han querido dejar pasar sin castigo y han elevado a falta flagrante de tipo 2, pese a que los colegiados ni siquiera la vieron.
Imagen de la acción en la que Kevin Love pisa a Luis Scola y por la que ha sido sancionado.
Mike Brown, también sancionado
Por otro lado, la liga ha decidido sancionar también con un partido de suspensión y 25.000 dólares de multa al entrenador de Los Angeles Lakers, Mike Brown. El motivo no es otro que su expulsión en el partido que su equipo disputó ante los Jazz. Brown tocó a uno de los colegiados, algo estrictamente prohibido, y retrasó su salida de la pista tras ser expulsado mientras seguía protestando a los colegiados.