Una muy mala noticia para los Nets. Una de sus grandes referencias ofensivas, el pívot Brook Lopez, sufre una fractura por estrés del quinto metatarsiano del pie derecho. Una delicada lesión para un hombre de 2,13 que precisará, sin duda, una larga recuperación.
Nadie se pone de acuerdo sobre cómo será de larga su baja. Para empezar, habrá que aguardar a cómo sale la operación quirúrgica a la que se someterá mañana. A partir de ahí, las estimaciones más optimistas, mucho lo parecen, hablan de una ausencia de entre 4 y 6 semanas. Es decir, podría volver en febrero. Pero no parece que todo vaya a ser tan fácil. No hay que olvidar que con una lesión similar y la misma altura el jugador español Pau Gasol estuvo 3 meses en el dique seco. Y con más altura y más peso, el internacional chino Yao Ming vio cómo su carrera deportiva se iba al garete.
Un doble problema
El problema que se le presenta a New Jersey Nets es doblemente preocupante. Por una parte, el equipo del ruso Mikhail Prokhorov pierde a uno de sus elementos más importantes en la ofensiva. No en vano, promedió la pasada temporada 20,4 puntos por partido. Pero por otra, pierde a la pieza esencial para poder conseguir a Dwight Howard en un intercambio. Y Nets era el destino preferido de los rumores que rodean desde hace semana a Howard.
El anuncio de la lesión lo ha hecho hoy el general manager de los Nets, Billy King, aunque en realidad la fractura se produjo en la primera parte del partido que enfrentó anoche a Nets y Knicks. Pero Lopez siguió jugando, con molestias, pero siguió jugando. Tras el choque es cuando se vio realmente el alcance de la lesión.
Lopez tuvo una brillante carrera universitaria en Stanford y es hermano gemelo de otro jugador de la NBA, Robin Lopez, pívot de Phoenix Suns. Brook y Robin son hijos de madre estadounidense, que fue nadadora de gran nivel, y padre cubano, aunque se criaron con su madre bajo el modelo estadounidense.