En pleno 'lockout', ha saltado una triste noticia: Yao Ming se retira de la NBA. El pívot chino de Houston Rockets pone fin así a una rica trayectoria de 9 años (8 reales) en la mejor liga del mundo, una trayectoria que ha quedado truncada por culpa de los lesiones.
El anuncio del prematuro abandono llega cuando Ming está en una edad ideal para jugar al baloncesto, una época de madurez, ya que nació en Shanghai hace 30 años. Una edad a la que el gigante asiático ha llegado muy cascado por culpa fundamentalmente de sus problemas en los pies, que no han podido soportar su tremendo cuerpo de 2,29 de altura y 141 kilos de peso. Esos pies de barro han causado un serio varapalo a los Rockets, que pierden a su jugador franquicia. Y el argentino Luis Scola queda huérfano en la zona texana.
Las primeras informaciones sobre la retirada de la NBA de Ming -no se sabe si en un futuro podría jugar en ligas menos competitivas- han partido de Yahoo Sports! y el diario Houston Chronicle.
Ming fue elegido en el puesto número 2 del draft de 2002 y desde entonces ha disputado 9 temporadas con Houston, equipo con el que jugó 486 encuentros de temporada regular y 28 de playoffs. Una de esas campañas, la penúltima, resultó inexistente al no jugar un solo partido
Sus primeras 3 temporadas fueron limpias en cuanto a lesiones, jugando 82, 82 y 80 partidos, es decir, disputando 244 encuentros sobre 246 posibles. Pero ese inicio indestructible se truncó en la cuarta campaña, cuando empezó a tener problemas físicos, que no le abandonaron ni el quinto ni el sexto año y que llegaron a su máxima expresión en las 2 últimas, en la que solo disputó 5 encuentros con la camiseta de los Rockets.
El internacional chino promedió en sus partidos de temporada regular 19 puntos, 9,2 rebotes y 1,9 tapones, anotando el 52,4% de sus tiros de campo. En postemporada, sus números alcanzaron los 19,8 tantos y 9,3 capturas en los aros.