La eliminación anoche de los Grizzlies no ha hecho desaparecer el buen sabor de las bocas de los aficionados del equipo, ni de la de su propietario, Michael Heisley, cuya máxima preocupación es ahora la de mantener el núcleo del equipo y, sobre todo, a Marc Gasol.
El pívot catalán es el único jugador de entre los considerados fundamentales en la plantilla que no tiene contrato en vigor para el año que viene, aunque es agente restringido y los Grizzlies pueden igualar este verano cualquier oferta en firme que se le haga desde otra franquicia.
El problema es que el valor actual de Gasol en el mercado es alto, más tras su buena actuación en la fase final, y la franquicia de Memphis, tras las renovaciones millonarias de Zach Randolph, Rudy Gay y Mike Conley, puede verse en dificultades para igualar las previsibles ofertas que han de llegarle al pívot español.
Aun así, Heisley ha segurado estar dispuesto a hacer un esfuerzo económico por retener a Gasol. “Marc decidirá si quiere estar aquí. Nosotros vamos a hacer todo lo posible para que se quede. Es un agente restringido, así que podemos igualar lo que sea que le ofrezcan. Pero, obviamente, si Marc quiere marcharse, mi actitud va a ser diferente que si quiere quedarse”, ha asegurado Heisley.
El propietario de los Grizzlies, eso sí, se muestra convencido de que el catalán querrá permanecer en el equipo. “Confío en que quiera quedarse. Y después de lo que hemos hecho en los playoffs, creo que será así”, remacha Heisley, que asegura sentirse feliz por el actual momento del equipo, “Era mi sueño cuando llegué a Memphis”.
En las últimas semanas se ha especulado con la posibilidad de que la franquicia de Tenessee trate de traspasar a Gay para disponer de un mayor margen de maniobra a la hora de retener a Gasol y reforzar su segunda unidad, pero ahora mismo no está clara cuál es la verdadera posición de los responsables del equipo respecto al futuro del alero, ausente en la fase final por culpa de una lesión.