Derrick Rose decidió devolver la serie a su cauce y con una actuación prodigiosa coronada con 44 puntos llevó a Chicago a la victoria en Atlanta, un triunfo que hace que los de Tom Thibodeau recuperen el factor cancha perdido en el encuentro inicial de la eliminatoria.
El Philips Arena sufrió los rigores del mejor Rose, de un MVP sin tapujos, pero también la adversidad que supone ver cómo tu equipo se estrella contra una de las mejores defensas de la NBA, una defensa a la que no le importó recibir puntos de Jeff Teague (21) si con ello dejaba fuera de juego, como así hizo, a piezas clave del equipo local como Joe Johnson, Jamal Crawford o el dominicano Al Horford.
El partido tuvo poca historia. Dominio de principio a fin de los Toros y 2-1 en la serie a su favor.
Atlanta 82 Chicago 99 (1-2)
Ha sido un visto y no visto. Atlanta dio el golpe en el United Center nada más empezar esta semifinal de conferencia, pero Chicago ha dado la vuelta a la situación con suma facilidad, recuperando el factor cancha perdido al ganar anoche en el Philips Arena bajo la batuta de un Rose encendido.
Poco le importó al equipo de Illinois que entre Deng, Boozer y Noah, un trío esencial en su juego, sumaran 15 puntos con una serie de 7 de 24 en el tiro. Porque les bastó que Noah rindiera a gran nivel en las labores de intendencia importantes (15 rebotes y 5 tapones), que la segunda unidad funcionara como un reloj dejando en entredicho a los suplentes de Atlanta, que el lanzamiento de 3 abriera un abismo entre ambos equipos... y que Rose hiciera de Rose. Casí con esto último fue suficiente.
El partido se decidió en el primer tiempo (43-56), casi desde el salto inicial. Porque Chicago dominó de principio a fin y ya puso las cosas en su sitio en el primer cuarto, 12 minutos esclarecedores que sirvieron para contemplar ya de inicio la explosión de Derrick Rose, autor de 17 tantos en ese primer periodo.
La defensa de los Bulls, brutal toda la noche, supo establecer sus prioridades. Poco les importó que Jeff Teague, sustituto del lesionado Hinrich, metiera 11 puntos en ese primer acto y 21 al final del partido, ya que lo verdaderamente importante se fue cumpliendo con escrupulosa minuciosidad. Sí, Teague anotaba, pero Joe Johnson, Jamal Crawford y Al Horford, piezas vitales del equipo local, quedaban en el anonimato.
Entre Johnson, Crawford y Horford lograron 27 tantos con 12 de 31 en el tiro. Ninguno de ellos pasó de 10 puntos. Horford, al menos, defendió muy bien en la pintura, pero ni pudo parar la avalancha reboteadora de Noah, ni supo acertar en ataque. El dominicano no anotó en los primeros 18 minutos del choque y concluyó con 10 puntos y 8 rebotes en 37 minutos.
Mientras todas esas piezas importantes (Boozer, Deng, Johnson...) no hallaban salida en el partido, Rose se emborrachaba de él, se bebía hasta la última gota de su esencia. Y la grada lo sufría, claro. Aunque terminó convencida y rendida a sus pies.
El ex de los Tigers acabó con 44 puntos, 7 asistencias y 5 rebotes en 38 minutos. Metió 16 de sus 27 tiros de campo, incluidos 4 triples, estuvo especialmente feliz en el tiro en suspensión de media distancia y sólo extravió 2 balones. Un MVP sólido. El cartón-piedra es cosa de otros.
Chicago fue una máquina perfecta. Dominó el rebote siempre, llegando a superar a Atlanta incluso en el aro local, donde al final Atlanta hizo 25 capturas por 18 de los Bulls. Pero también superó al rival claramente desde el triple (10 de 20 por 1 de 6) y arrasó con su segunda unidad, llegando a alcanzar una ventaja de 22 puntos.
Los suplentes de los Bulls triunfaron. Totalizaron 34 puntos por 14 de los locales. Taj Gibson estuvo inmenso con 13 puntos y 11 rebotes en 26 minutos, Kyle Korver enchufó 3 triples para aportar 11 tantos en 18 minutos y C.J.Watson añadió 8 en 10 minutos. Producción firme de la segunda unidad visitante, una producción que no resultó baladí.
La derrota deja la serie 2-1 para Chicago y supone un gran golpe para los Hawks. Y es que, tal y como reconoció tras el partido Horford en su cuenta de Twitter, fue una "dura derrota" y, todo parece indicar, que decisiva.