De principio a fin y con un juego excelente. Así es como han ganado los Grizzlies su primer partido en una segunda ronda de la NBA. Lo han hecho en la casa de uno de los gallitos del Oeste, Oklahoma City Thunder, en la casa de Durant. Zach Randolph y Marc Gasol lo han bordado.
Z-Bo ha demostrado que está en estado de gracia y ha acabado con 34 puntos, 10 rebotes, 3 recuperaciones y 9 de 9 en los tiros libres. Marc Gasol le ha acompañado con 20 puntos, 13 rebotes, 3 tapones y 4 asistencias en 35 portentosos minutos en los que metió 9 de sus 11 tiros de 2 para totalizar 37 de valoración. Ese dúo estelar (o lo que es lo mismo, sus ¡¡¡54 puntos y 23 rebotes!!!) ha resultado un Tourmalet infranqueable para los favoritos, que han caído sin paliativos ante una afición que esperaba mucho más de los suyos.
Oklahoma City 101 Memphis 114 (0-1)
Primero se cargaron a los Spurs y ahora tienen toda la pinta de que se quieren cargar por la vía del KO técnico a los Thunder. Estos Grizzlies parecen no tener límite. Y es que pocas veces se ve jugar en la NBA a un conjunto con un espíritu de equipo tan ausente de fisuras, tanto en ataque como en defensa.
La fluidez ofensiva de Memphis fue bárbara. La circulación de balón fascinante de los de Hollins destrozó una y otra vez la composición defensiva del equipo de Scott Brooks, que nada podía hacer para limitar los estragos causados en la zona por el poder de los hombres interiores de Memphis. Si a eso sumamos el gran rendimiento de la segunda unidad de los Grizzlies y los 11 robos por sólo 8 pérdidas de los visitantes contra los 6 y 18 de los locales... Porque las pérdidas de balón fueron una sangría para Oklahoma.
Todos los jugadores de Memphis que saltaron a la cancha -9- anotaron. Bueno, todos lo habían hecho ya antes del descanso. Al dúo interior imparable, se sumaron los 15 puntos y 7 asistencias de Conley, los 11 de Battier, los 10 de Allen...
El venezolano Greivis Vásquez volvió a entrar en la rotación como segundo base y salió como un tiro en los primeros instantes, tal y como hiciera en el sexto encuentro ante los Spurs. Terminó el ex de Maryland con 4 puntos y 3 asistencias en 9 minutos. Dirigió muy bien a los suyos cuando estuvo en acción.
Otro jugador que brilló, pero en el otro equipo, fue el congoleño nacionalizado español Serge Ibaka (¡qué dúo de fieras Gasol e Ibaka!). El ex de Hospitalet concluyó con 16 puntos, 11 rebotes y 5 tapones tras firmar un excelso tercer cuarto.
Ni siquiera le sirvió a Oklahoma City el rendimiento de Durant y Westbrook, que nunca se pusieron de acuerdo. El primero sobresalió en la segunda parte y el segundo en la primera. Kevin Durant ejerció de estrella con 33 puntos y 11 rebotes y Russell Westbrook no le fue a la zaga con 29 tantos, 8 rebotes y 6 asistencias, si bien falló bastante en la segunda parte y concluyó con 7 pérdidas de balón. Detrás de Durant, Westbrook e Ibaka vino la nada y ahí estuvo el problema. Decepcionantes, por ejemplo, Perkins y Harden.
Los Grizzlies dominaron de principio a fin. Ya en el primer cuarto empezaron a mover la bola con criterio y para cuando el partido estaba inmerso en el segundo cuarto ya dominaban por 16 puntos (llegaron a hacerlo en la segunda parte por 17 tantos) para irse al descanso 10 arriba: 47-57. Y es que la regularidad ofensiva de Memphis resultó apabullante, 57 puntos en cada mitad de partido. Una ofensiva inusual en playoffs.
Los Thunder pelearon el partido en el último cuarto, pero nunca llegaron a acosar de verdad a Memphis, que resistió con una solidez a prueba de bomba ese final de choque sin que sus nervios se alteraran para lograr así un grandísimo triunfo.